Sobre 800 metros, la generación nacida en 2017 empezó a ver acción en la arena de Palermo

No hay pausa para la presentación de los dos años en los hipódromos centrales. Este domingo fue el turno de Palermo, donde se disputaron tres competencias para la nueva generación, con una concurrencia llamativamente alta para tan temprana etapa. A los 8 episodios clasificatorios del Clásico Precoces en La Plata y los 2 que se corrieron hace poco más de una semana en San Isidro, ahora la camada nacida en 2017 inició su trajinar en la arena porteña con tres nuevas competencias.

Los potrillos salieron a la cancha en el Premio Pallazzina (800 m) donde Agiosto (Angiolo e Incredulidad, por Intérprete, Haras El Paraíso) y Bajan (Flesh for Fantasy) ofrecieron un muy apasionante espectáculo, con el primero dominando a 300 metros del disco y controlando a su rival por apenas el pescuezo, deteniendo el reloj al cabo de 44s25/100.

Al cuidado de Eduardo Accosano para el Stud Las 3 Semillas, llevó a Iván Monasterolo en sus riendas y defendió de la mejor forma su amplio favoritismo, ratificando las condiciones de su padre en producir caballos capaces de correr bien temprano y con efectividad.

Al ratito, las potrancas se midieron en la misma distancia al cabo del Premio Morosina, donde el margen fue el mismo: pescuezo. En este caso, Important Date (Expressive Halo e Important Thing, por Sunray Spirit, Haras Abolengo) se recuperó tras quedar algo lejos para quedar al frente con 300 metros por recorrer y definir por aquella ventaja sobre Simplify (Zensational), con Fatal Woman (Qué Vida Buena) en tercero al anca. Martín Valle y Jorge E. Cruceño fueron los profesionales que se lucieron con la representante del Stud Corazón Negro, de La Punta.

Por último, la división del Premio Pallazzina trajo nombres conocidos al disco, con la lucida victoria de Splendid Key (Key Deputy y Splend Zensational, por Zensational, Haras Firmamento), que portando la chaquetilla de El Alfalfar ganó de punta a punta y por 4 cuerpos sobre Dear Lenovo (Lenovo). Facundo Coria montó al pupilo de María F. Alvarez y Walter Suárez.