La hija de Greenspring voló en la recta del norte para quedarse con el Clásico Vale Dori

La atropellada de Atrevida Tanto (57 kg.) en el Clásico Vale Dori (1200 m, arena), la prueba más importante de la jornada del miércoles en el Hipódromo de San Isidro, fue impactante, un poema. Voló la hija del generoso y tempranamente desaparecido Greenspring, que cuando pisó la recta ni siquiera aparecía en la pantalla mientras adelante la favorita Wounded Lip (Hurricane Cat, 54 1/2) y la veterana Nasya (Art Master, 60) quemaban las últimas energías tras luchar desde la partida.

La verdad, si abrían las ventanillas pocos hubieran depositado sus esperanzas en la pupila de Eduardo Corsiglia, que largó “con ellas”, pero que después quedó lejos tras sujetar. A partir de allí, con paciencia, el jockey Alexis López empezó a construir junto con la zaina una de las victorias más espectaculares de la temporada y también de los tiempos recientes.

Cuando arrancó abierta, Atrevida Tanto salió como desde una catapulta, pasó de largo y arribó a la meta con comodidad y 4 cuerpos de ventaja sobre Turista (Valid Stripes, 55), que se movió tercera y aprovechó el quedo de las líderes para capturar la posición de escolta; a medio pescuezo, cabeza y medio cuerpo, llegaron después Wounded Lip, Aspera Mal (Fragotero, 54) y Pure Indira (Lizard Island, 57), con Nasya cerrando la marcha a más de 7 largos de la vencedora, que estableció un tiempo de 1m9s56/100.

Propiedad del Stud Ball Sider y criada por Jorge Rodolfo del Piano, Atrevida Tanto venía de perder su invicto en La Plata, la cancha donde antes había ganador en sus cuatro primeras salidas. A seguirla de cerca porque tiene toda la pinta de ser una yegua de las buenas…