La tordilla alcanzó un valioso triunfo sobre 2200 metros, después que se fatalizara Bet to Life en el clásico
La hípica tiene esas cosas. Las tristezas y las alegrías suelen mezclarse como si el diablo metiera la cola, como si el destino estuviera escrito, o no. Habría que verlo… El mix casi no da ni tiempo de hacer el duelo ante una mala nueva y la sonrisa por un triunfo, siempre tan difíciles de conseguir, nunca está demás recordarlo.
Sensaciones encontradas las que le dejó el lunes al entrenador Gustavo Scarpello y a su equipo de trabajo. Rosendo, el peón de Bet to Life (South Kissing), todavía no había podido digerir ya no tener más a su petisa querida tras fatalizarse durante la disputa del Clásico Ricardo P. Sauze (G3), que una foto ya había hecho mutar las caras tristes por una mueca algo más alegre.
Fue Blame Me la que le dio un cariz bastante más feliz a una tarde que arrancó amarga, consiguiendo el tercer triunfo de su campaña en el entretenido Premio Key Dance, que sobre 2200 metros midió yeguas de 4 años con una o dos conquistas previas en su haber.
La hija de Lizard Island y Etnia (Halo Sunshine) respondió a los boletos mayoritarios superando por el pescuezo a Celeste y Blanca (Indygo Shiner), conteniéndola durante buena parte del derecho, tras hacer la punta y tramo al inicio y luego cederle la vanguardia a Joy Angus (Fortify).
La defensora del Stud Los Betos fue conducida por Eduardo Ortega Pavón, demoró 2m17s49/100 en cubrir la distancia sobre pista normal y ahora puede tener en su futuro inmediato algún intento clásico.
Bien temprano, en tanto, entre veteranos ganadores de 3 ó 4 carreras, se resolvió el Premio Salad Green. Tras una partida algo complicada por los golpes, Relatos Salvajes (Equal Stripes e I’m Moving On, por Not for Sale, Roberto A. Vignatti) ratificó sus bondades con una contundente victoria por tres cuerpos sobre Versero Key (Key Deputy).
Ahora son cuatro primeros en seis salidas los que acumula el defensor del Stud Juan Antonio que presentó Florentino Cascia, como Blame Me, ahora listo para enfrentar retos más complicados en categorías superiores.
