La potranca de Pozo de Luna alcanzó su mejor triunfo y clasificó para el Breeders’ Cup Distaff (G1); el 9 del corriente viajará hacia los Estados Unidos buscando repetir la hazaña de Blue Prize

Por Diego H. Mitagstein

Los buenos caballos marcan diferencia, por ejemplo, ganando carreras que deberían haber perdido. Pues bien, durante la recta final del Gran Premio Criadores (G1-2000 m) del sábado porteño, la gran favorita Blue Stripe estuvo en aprietos, pareció que perdía; sin embargo, hizo relucir ese plus de los diferentes, apeló a su corazón y, en yunta con la determinación de Eduardo Ortega Pavón, su jockey, sacó adelante un resultado soñado por su gente y que la clasificó directamente para correr el Breeders’ Cup Distaff (G1) del 6 de noviembre próximo en Del Mar, Estados Unidos, ya que desde hace varios años forma parte del Challenge Series.

Todo el plan trazado por Nicolás Martín Ferro, preparador de la zaina, y el equipo del Stud-Haras Pozo de Luna, colores que defiende la hija de Equal Stripes, tenía el objetivo de viajar (ya se confirmó que el 9 de mayo embarcará rumbo a Florida…), por eso se dejó pasar el Gran Premio Gilberto Lerena (G1) tras su triunfo en el Clásico Bullrich (G2), y se apuntó exclusivamente al Criadores.

Algo enojada en el primer tramo, producto de esa energía que tenía ahorrada, Blue Stripe corrió siempre cerca, dejando que Kalivia (Exchange Rate) moviera la carrera para intentar favorecer a su compañera Silky Rose (Catcher In the Rye), y con Mahagonny (Storm Embrujado) a las patas de la gran favorita, marcándola de cerca.

Una vez en el derecho empezó la acción, la puntera abandonó y Blue Stripe junto con Mahagonny se adueñaron de la imagen, mientras más atrás crecía la figura de Soviet Catch (Catcher In the Rye), bien abierta, atropellando. Aquellas comenzaron una lucha por la victoria que fue cambiando de manos en la impresión varias veces, hasta que por fin en los 100 metros finales la hermana materna de la crack Blue Prize inclinó la balanza a su favor, marcando el diferencial de los buenos.

El sufrimiento igual fue grande, pues Soviet Catch cargó tan fuerte que se quedó con el placé a la cabeza, desplazando de esa colocación a Mahagonny por apenas medio pescuezo, todo tras 1m59s1/100, un tiempazo en una tarde de tiempazos.

Con el objetivo cumplido, será hora de emprender el viaje hacia los Estados Unidos para Blue Stripe, en pos de repetir la hazaña de Blue Prize en el Distaff. Se va una yegua buena, con corazón y calidad, de esas que permiten soñar con esas grandes historias que tantas veces “las nuestras” nos hicieron vivir por aquellas tierras…