Después de más de 2 años, el ganador del Clásico Old Man (G3) de 2018 pudo volver al recinto de los vencedores
Después de una reprise que sirvió para ponerse a punto, el bueno de Che Evasor pudo por fin reencontrarse con la victoria, este lunes en la carrera inicial de la jornada en el Hipódromo Argentino de Palermo. Después de 26 meses, y sobre 1000 metros, el hijo de Greenspring y Thundery Malice (Thunder Gulch) que prepara Marcelo Sueldo se lució venciendo con absoluta comodidad, de punta a punta y por 7 cuerpos a Beautiful Day (Stay Thirsty) en la excelente marca de 55s84/100.
Nadie se sorprendió con semejante demostración por parte del defensor de la caballeriza Montana y que fue criado por Patricio F. Losinno, pues es imposible no recordar la excelente campaña que cumplió de potrillo, siendo uno de los más destacados de su generación.
Vencedor en la final de la Copa Roberto J. Bullrich, viviría su momento de mayor gloria quedándose con el Clásico Old Man (G3) de 2018, ocasión en la que superó por 6 cuerpos a Raven Master (The Leopard), luego gradual en La Plata. A renglón seguido escolta de Accionador (E Dubai) en el Clásico Miguel Cané (G2), sería luego puesto en descanso, pudiendo competir desde entonces en apenas 3 ocasiones.
Ahora aparentemente recuperado de sus viejas dolencias, y ya radicado definitivamente en la recta, da la sensación de que puede haber una nueva primavera en los clásicos para Che Evasor, que tiene la posibilidad, incluso, de seguir sumando rodaje en pruebas intermedias como handicaps o especiales antes de chocar con los nombres más destacados de la especialidad.
Con Che Evasor se recuperó un buen caballo, que siga con salud será la clave.
