En una demostración notable, la hija de Violence no tuvo ni para empezar con sus rivales del viernes en Palermo

Está claro que la lógica no es algo que se de todos los días en temas hípicos, pero, que Che Maga haya ganado como ganó el Clásico General Güemes (G3-1000 m, arena), era lo que todos esperaban ver. Fue un paseo de salud llegar a la décima conquista de su campaña para la yegua de Patricio Losinno y su Stud Chemeco, en una de las dos pruebas jerárquicas que incluyó una reunión interesante pero que no tuvo demasiada recepción, con tribunas casi vacías y otra recaudación magra, señal de que competir con el Mundial de fútbol, juegue quien juegue, es imposible para nuestro deporte, menos aún en época de temperaturas altas, aunque ayer el día estuvo soñado.

La hija de Violence venía de echar el resto para superar a Leona Mística (Lion’s Circle) en el Clásico Venezuela (G2), en una gestión un tanto desconcertante. Pero ahora la zaina sí fue la Che Maga que todos conocen, que le pone los puntos a sus rivales con claridad, mucho más, cuando los supera ampliamente en antecedentes, como era el caso ahora.

Movió un pedacito William Pereyra con la pupila de Roberto Pellegatta y Juan Saldivia en el comienzo, como para hacerla entrar en ritmo, dejando luego que Linda Tablet (Lenovo) y Tarde Libre (Fortify) se mostraran a la descubierta. Pero ya en la mitad del recorrido llegó el momento de entrar en escena para la enorme favorita.

Desde el centro de la pista fue hacia la verja, en un movimiento que cruzó a una Linda Tablet ya “cocinada”, innecesario por cierto por parte de Pererya. El resto fue todo sencillo, pues, con andar muy firme, descontó los metros que quedaban hasta el disco para cruzarlo con 9 cuerpos de ventaja sobre la potranca Tarde Libre, que por 3/4 de cuerpo y 3/4 de cuerpo postergó a Simple Ecuación (Sebi Halo) y a su compañera Piedra Preciosa (In the Dark), tercera y cuarta, respectivamente. Ultima, a 7 largos más, llegó Linta Tablet, pagando el precio de saltar desde la categoría alternativa hasta las graduales, todo tras una meritoria marca de 55s71/100 en una cancha que se mantiene en buen estado pese a la sequía, y que Palermo ya empezó a matener con firmeza de cara a repetir la experiencia del verano pasado, cuando la acondicionó permanentemente.

Para Che Maga, como se dijó, fue la décima conquista de su trayectoria, y tercera seguida, con 6 de ellas dentro del plano de los clásicos de grupo y 7 en lo jerárquico, sin contar varios arrimes de excelente nivel, y todo con apenas 5 años.

La zaina es hija de Violence, el Medaglia D’Oro que tan bien está considerado en los Estados Unidos y que aquí sirvió en el Haras La Pasión, produciendo a la fecha 9 ganadores clásicos, 2 de ellos de G1: el campeón Fiel Amigo y Dando del Barrio.

Che Maga tiene por madre a la estadounidense Runfromthestorm (Stormy Atlantic), generosa por donde se la mire, como que aquí dio otros 5 ganadores, incluído el placé clásico Back for You (Not for Sale) y la buena de Che Máquina (Violence), en la misma familia que produjo en el país a Leytonstone (Exchange Rate), otro caballo de singulares capacidades y que supo vencer en el Handicap Dr. Pedro M. Crespo.

Para Che Maga, después de lo visto este viernes en Palermo, podría haber ahora una nueva prueba ante los mejores exponentes de la división en el Gran Premio Félix de Alzaga Unzué (G1), carrera en la que fue cuarta hace 12 meses y para la que se anotará este lunes. De ocurrir, será más que merecido para la, ahora, “chica 10”.