La hija de Violence se impuso con solvencia este sábado y llegó al double-event en el Clásico General Francisco B. Bosch (G3)

El dominio de Che Maga en los clásicos de la recta sobre la arena del Hipódromo Argentino de Palermo es cada vez más contundente. De regreso a su pista preferida, tras su paso por el Gran Premio Félix de Alzaga Unzué (G1) de San Isidro, la zaina del Stud Chemeco volvió al triunfo llegando al double-event en el Clásico General Francisco B. Bosch (G3-1000 m, arena pesada), la prueba más importante del súper sábado que se vivió en el centro.

Con una concurrencia aceptable de público para la época del año, la atractiva propuesta rindió totalizando una recaudación de 131.125.389 pesos, incluso, pese al fuerte chaparrón que cayó a la tardecita. Durante gran parte del día la gente se apiló en los lugares donde la sombra ofrecía un respiro al calor, mientras la Tribuna Paddock continúa “inactiva” tras el desprendimiento que se vivió hace ya 2 meses, situación que amerita una resolución rápida para favorecer que los hípicos vayan a las carreras y encuentran allí cierta comodidad que hoy no se encuentra.

Volviendo a Che Maga, otra vez no hubo como parar a la hija de Violence, capaz de ganar corriendo al son de la banda o viniendo de las últimas, como ocurrió en esta oportunidad. William Pereyra optó por mantener a la pupila de Roberto Pellegatta y Juan Saldivia en la zaga, dejando que Madonna Key (Key Deputy) marcara el paso.

De los 500 a los 300 avanzó libre por el centro de la pista la ganadora, que dominó y comenzó a distanciarse sin mayores inconvenientes, sacándole en el disco 4 cuerpos a la valiente Madonna Key, siempre protagonista. A 2 largos más, Jumpy Spring (Full Mast) no fue la misma que en el césped fue capaz de terminar segunda en el mencionado Unzué, y terminó tercera.

Fue bueno lo de Avarizza (Qué Vida Buena) saltando desde las condicionales para llegar cuarta y más flojo lo de Anguila de Coral (Santillano), que perdió algunos de los puntos que había sumado en sus actuaciones previas. El tiempo de 54s79/100 sobre cancha alterada habla a las claras de la potencia de Che Maga.

Criada por Patricio Losinno, cuyos colores defiende, Che Maga fue primera en sus cuatro últimas presentaciones sobre la arena porteña, llegando a los 11 éxitos por total sobre 26 presentaciones, quedando en apenas 4 ocasiones fuera del marcador y ya ubicando su cuenta bancaria en el orden de los 11.975.600 pesos, una pequeña fortuna.

Che Maga tiene por padre a Violence, un generador de sprinters por demás generoso, más allá de ser hijo de Medaglia D’Oro (El Prado), genética para pensar en tiros mayores. Runforthestorm (Stormy Atlantic), su madre, produjo generosamente en el país, dando también al placé de G3 Back for You (Not for Sale) y a los ganadores múltiples Che Máquina (Violence), Che Irlandés (Asiatic Boy) y Che Malevo (Todo Un Amiguito). La yegua fue importada en su momento por el desaparecido Haras Arroyo de Luna.

Che Maga es una referencia hace ya mucho tiempo entre las velocistas y quizás le está faltando alguna gestión más destacada en los G1. Claro, debe decirse que en ese ámbito se cruzó con caballos del nivel de Luthier Blues (Le Blues), entre otros, y de allí que se le haga complicado concretar ese objetivo.

Ya empezó el camino hacia el Gran Premio Ciudad de Buenos Aires (G1), del 1 de mayo próximo, y hacia allí seguramente enfocará su gente, intentando conseguir esa gloria en el nivel máximo.