La fantástica campeona de Coolmore regresó con una actuación para la historia en el miércoles de Royal Ascot
Maravillosa. Sublime. Unica. Busque usted, amigo lector, el calificativo que más le guste y ríndale tributo a la campeona Love, que reprisando ofreció una cátedra de coraje y calidad para transformarse en la gran figura del segundo día de Royal Ascot 2021 construyendo un triunfo increíble en el Prince of Wales’s Stakes (G1-2000 m, césped de bueno a firme).
Está claro que la baja de Lord North (Dubawi) le sacó del medio al rival que, en la previa, aparecía como el escollo principal para la alazana de Coolmore, pero entre el largo tiempo sin correr, un desarrollo que la obligó a venir adelante desde la partida y la estupenda actuación de Audarya (Wootton Bassett), que la exigió siempre, el combo hace que su actuación pueda catalogarse como descollante.
Perdía en todos lados la hija de Galileo, que ya en la curva final parecía venir complicada. Pero buscando en su interior, sacando esa llama que sólo los distintos guardan, respondió al rigor de Ryan Moore, su jockey, y levantó una pared al frente llegando al disco con 3/4 de cuerpo de ventaja sobre Audarya, que en su muestra más cercana había vencido a la mismísima Rushing Fall (More Than Ready) en el Breeders’ Cup Filly & Mare Turf (G1) de noviembre en Keeneland. A idéntica diferencia, Armory (Galileo) completó el 1-3 de Ballydoyle, con My Oberon (Dubawi) en cuarta posición, todo tras 2m6s86/100, una marca excelente.
Como Duke of Marmalade (Danehill), So You Think (High Chaparral) y Highland Reel (Galileo), Love le dio el triunfo a Coolmore y a Aidan O’Brien en el Prince of Wales’s Stakes, provocando elogios al por mayor por parte del entrenador récord.
“La carrera le va a hacer muy bien para ponerse mucho mejor. Estamos encantados con su actuación. Es muy genuina y valiente y tuvo en Ryan Moore un jockey que hizo todo lo posible para ganar y hacer lo correcto con ella. El King George, el Eclipse, cualquiera de esas carreras pueden estar en su futuro ahora”, contó O’Brien, desbordado de alegría.
Moore, por su parte, tampoco estuvo egoísta en materia de elogios para la crack: “Es una yegua de alta calidad. Fue su primera carrera desde agosto y fue capaz de superar a una ganadora de la Breeders’ Cup, por lo que estoy seguro de que ahora sí mejorará mucho. Realmente me asombro su victoria. Tenerla de regreso es muy importante para todo el equipo, y más con el panorama que se le abre ahora. Su habilidad es enorme y siempre da el todo por el todo, no dudo que a medida que vaya avanzando el año se irá poniendo mejor”. Para el jockey fue el segundo triunfo de su carrera en su trayectoria, pues también se había llevado la copa en 2017 con el mencionado Highland Reel.
Como Palace Pier (Kingman) y Poetic Flare (New Approach) el martes, Love cumplió con lo esperado en una de las grandes citas que propone cada temporada el mitín real. O’Brien la esperó todo lo necesario hasta estar seguro de que su yegua estaba en condiciones para reprisar, quizás no óptimas, como dejan entrever cada una de sus palabras, pero sí lo suficiente como para ganar.
La gran campeona que el turf mundial tuvo la oportunidad de disfrutar en 2020 está de regreso e intacta, como para pensar que esta temporada también puede luchar por el cetro del mejor caballo en Europa. El cielo es el límite para la Galileo, que en el Prince of Wales’s Stakes mostró todo su corazón y toda su calidad, cualidades distintivas de los caballos distintos.
