A sus 7 años, el hijo de Dubawi repitió su hazaña de 2021 y 2022 y batió al japonés Danon Beluga, que llevó a Joao Moreira “up”

DUBAI, Emiratos Arabes Unidos (Especial para Turf Diario).- Una de las grandes atracciones que tenía el mitín 2023 de la Dubai World Cup era saber si el estupendo Lord North lograría hacer historia y ganar por tercera temporada seguida el Dubai Turf (G1-1800 m, césped, US$ 5.000.000 de bolsa).

A base de su calidad, y en sociedad con el jockey italiano Frankie Dettori, el hijo de Dubawi y Najoum (Giant’s Causeway) tuvo la mejor respuesta para tantas expectativas quedándose con la victoria y guardando por siempre su lugar en los libros.

Lo que habrán agradecido durante todo este tiempo John y Thady Gosden, sus entrenadores, y el Sheikh Zayed Bin Mohammed, propietario del zaino, haberlo castrado hace ya algunos años. Desde entonces, empezó a rendir lo que siempre se esperó de él, con notables actuaciones no sólo en Meydan, sino también en Europa y sumando la mayor parte de los más de 7 millones de dólares que ya lleva acumulados en recompensas.

Alguna vez ganador del Prince of Wales’s Stakes (G1) en Royal Ascot, a Lord North se lo había visto entero cuando reprisó hace un mes exacto llevándose el Winter Derby (G3) en el sintético de Lingfield, en Inglaterra, y ahora fue otra vez infalible.

Dettori, en su temporada de despedida, lo trajo contenido durante la mayor parte del recorrido, y sólo le mostró la cancha en la recta final, pasando de largo en la mitad del derecho y poniéndose a cubierto de la atropellada del japonés Danon Beluga (Heart’s Cry), que con el brasileño Joao Moreira en sus riendas sorteó algunos inconvenientes para arremeter hasta terminar como escolta a 3/4 de cuerpo, con Nations Pride (Teofilo) en tercero a la cabeza.

Criado por Godolphin, Lord North llegó a 10 triunfos en 20 presentaciones, ratificando su vigencia y manteniendo su invicto en la temporada, esa que ahora continuará seguramente en las grandes citas europeas, donde, como se dijo, ya supo destacarse.

Para Frankie Dettori fue asegurarse una gran victoria ante el público local, ese al que siempre deleitó y que lo reconoció con millones de aplausos.