La hija de Orfevre desbordó calidad para ser la gran figura de la jornada en Hanshin, Japón, llegando al tercer triunfo de G1 de su campaña
Las “chicas” están bravas en Japón. Mientras Almond Eye (Lord Kanaloa) espera en boxes para saltar a la pista tras su fallido viaje a Dubai, Lucky Lilac sigue ofreciendo actuaciones como para considerarla uno de los mejores caballos del momento en el país del sol naciente.
Valiente, imparable, la hija del crack Orfevre, se hizo un lugar donde no existía, sacó pecho, dominó y terminó quedándose con la versión 2020 del Osaka Hai (G1-2000 m, césped), corrido este domingo en Hanshin Racecourse y donde Makahiki (Deep Impact), el nieto de la G1 argentina Real Number (Rainbow Corner) terminó undécimo y anteúltimo, aunque a sólo 6 3/4 cuerpos.
Conducida por el italiano Mirco Demuro, Lucky Lilac ratificó su excelente momento batiendo por pescuezo y pescuezo a Chrono Génesis (Bago) -la otra yegua del grupo- y al favorito Danon Kingly (Deep Impact), al cabo de 1m58s4/10.
En la estadounidense Lilacs and Lace (Flower Alley), titular del Ashland Stakes (G1) de 2011 en Keeneland, Lucky Lilac llegó a la tercera victoria de G1 de su trayectoria, pues en diciembre de 2018 se había quedado con el Hanshin Juvenile Fillies (G1) y en noviembre último con el Queen Elizabeth II Cup (G1), en Hanshin y Kyoto, respectivamente. La ganadora venía de terminar segunda en el Hong Kong Vase (G1) de Hong Kong y en el Nakayama Kinen (G2), en Nakayama, donde fue superada por Danon Kingly, ahora tercero.
El fin de semana en Japón involucró otra carrera importante con el Lord Derby Challenge Trophy (G3-1600 m, césped), disputado en Nakayama y para todo caballo desde los 4 años. Allí todo terminó con la victoria de Kluger, que con sus 8 años era uno de los más veteranos del grupo, dando la sorpresa mientras el favorito Primo Scene (Deep Impact) quedaba apenas quinto.
Fue el primer festejo desde abril de 2016 para el hijo de King Kamehameha y la alemana Addicted (Diktat), que en el interín y mostrando un nivel sumamente desparejo había conseguido un par de interesantes segundos puestos, primero en el Sports Nippon Sho Kyoto Kimpai (G3) de Kyoto y, más cerca en el tiempo, en el ATC Queen Elizabeth Stakes (G1) de Randwick, en Australia, cuando su vencedora fue la mismísima Winx (Street Cry), la icónica yegua.