En el tercer día del Ebor Festival en York, la potranca se llevó el Nunthorphe Stakes (G1) y el fondista (foto) fue pura clase para alzarse por tercera vez en su campaña con la Lonsdale Cup (G2)

YORK, Inglaterra (Especial para Turf Diario).- Con un toque sudamericano, pues fue conducida por el brasileño Silvestre de Souza, la potranca Winter Power construyó la mejor actuación de su campaña para dar el golpe en el día 3 del Ebor Festival en York y quedarse con el Coolmore Wootton Bassett Nunthorpe Stakes (G1), corrido sobre 1000 metros en cancha de buena a firme. Pero no fue todo en el circo inglés este jueves, pues el otro gran punto de atención lo dio el regreso al triunfo del campeón Stradivarius (Sea the Stars), que por tercera vez en su fantástica campaña levantó el trofeo de la Lonsdale Cup (G2), sobre 3300 metros.

Previa vencedora en esta misma pista y distancia en el John Smith’s City Walls Stakes (L), la hija de Bungle Inthejungle y Titian Saga (Titus Livius) irrumpió en las ligas mayores de la velocidad europea exhibiendo una contundencia llamativa, pues batió por 1 1/4 cuerpo a Emaraaty Ana (Shamardal), con el arrimador Dragon Symbol (Cable Bay) en tercero a medio largo, todo tras voladores 56s72/100.

Aprovechando las bondades de una superficie veloz, de Sousa ubicó temprano al son de la banda a Winter Guest, que se fue afirmando a partir de los 500 metros para anular cualquier tipo de posibilidad entre los atropelladores, mejorando su récord a 7 primeros en 13 salidas y mucho más por dar.

Lo de Stradivarius fue propio de los caballos con corazón de oro. Después de un par de derrotas dolorosas, el pupilo de John Gosden volvió por sus fueros en una de sus carreras preferidas y a sus 7 años demostró que todavía no dijo su última palabra. Después de dejar que The Grand Visir (Frankel) liderara con comodidad, el alazán de Bjorn Nielsen cobró protagonismo en el derecho a la par de Spanish Mission (Noble Mission), con el que luchó los últimos 500 metros a brazo partido.

Pareció que perdía Stradivarius, pero apelando a su clase y con un Frankie Dettori que nunca dejó de exigirlo, el crack volvió en los tramos finales y dio vuelta el resultado, cruzando la meta con  la cabeza de ventaja sobre su rival para mejorar su récord a 18 éxitos en 29 presentaciones y confirmar sus excepcionales dotes para la distancia.