Con el alazán, el entrenador alcanzó su novena conquista en una de las pruebas más tradicionales de la costa oeste
ARCADIA, California (Especial para Turf Diario).- Hubo revancha para Defunded en la Hollywood Gold Cup (G1-2000 m, arena, US$ 400.000 de bolsa), una de las carreras para los caballos adultos con más historia en la costa oeste de los Estados Unidos. Tras llegar segundo de There Goes Harvard (Will Take Charge) hace 12 meses, el alazán derrochó calidad para quedarse con la victoria este lunes en Santa Anita Park, la segunda de su campaña en el máximo nivel.
En una tarde espectacular de turf, el hijo del generoso Dialed In construyó una muralla al frente, corriendo en todos lados, a su estilo, y ratificando todo lo bueno que venía de hacer al llevarse el Californian Stakes (G2), solidificando su posición como uno de los referentes de la división y en una gestión trascendente si se tiene en cuenta que la tuvo sobre la misma pista y distancia sobre la que en noviembre próximo se correrá el Breeders’ Cup Classic (G1).
Con Juan J. Hernández en sus riendas, Defunded vino con parciales de 23s89/100, 47s59/100 y 1m11s83/100, siempre marcado de cerca por Piroli (Battle of Midway), de la caballeriza chilena Don Alberto. Este último aumentó su presión al llegar la recta final, pero, exigido, el líder continuó corriendo fuerte hasta arribar a la meta con 1 cuerpo de ventaja sobre aquél rival, de gran carrera.
A 3 1/4 largos, Kiss Today Goodbye (Cairo Prince) completó la trifecta, mientras Country Grammer (Tonalist) era apenas cuarto a la cincha, rindiendo mucho menos de lo previsto y en un nivel similar al de su despedida, cuando a fines de marzo había fallado en la Dubai World Cup (G1) de los Emiratos Arabes Unidos.
La victoria de Defunded le permitió a Bob Baffert quedarse por novena vez con la Hollywood Gold Cup, transformándose en el preparador más victorioso de todos los tiempos en la prueba, dejando atrás al legendario Charlie Whittingham, con el que estaba empatado en 8 discos.
El primer éxito de Baffert en la copa había llegado hace un cuarto de siglo con Real Quiet (Quiet American), que, no casualmente, portaba los colores de Mike Pegram, los mismo que ahora lució Defunded, en sociedad con Karl Watson y Paul Weitman.
Ahora el récord del alazán marca 7 primeros en 17 presentaciones, totalizando premios por 1.588.100 dólares y empezando a mirar de reojo el Pacific Classic (G1) de Del Mar.
