En Argentina, Brasil, Uruguay, Perú y Chile sus hijos ya han producido con mucha generosidad, en una historia que recién comienza
En cuestiones genéticas, encontrar afinidad entre una línea paterna y una hípica en particular no es una circunstancia que no se aproveche. Cuando un padrillo tiene éxito, resulta lógico que los criadores busquen seguir el mismo camino para repetir la historia. Por ejemplo, en Argentina pueden encontrarse casos como los de Buckpasser (con sus hijos Logical y Egg Toss), Caro (Ringaro, Parade Marshal, etc.) o Storm Cat (Bernstein, Easing Along, Pure Prize, etc.). Sin embargo, no es algo tan común que esa “química” quede expuesta en varios países de una región a la vez.
Distorted Humor vendría a ser por estos días el “portavoz” de una llamativa sinergia en Argentina, Uruguay, Perú y Brasil, más algún aporte algo más pequeño en Chile, continuando con el trabajo que antes hicieron Forty Niner, su padre, y Mr. Prospector, su abuelo.
Vayamos por parte en este cuento de generosidad “sudamerican”, comenzando la pequeña recorrida por la Argentina, donde desde su aparición Fortify ha sido un verdadero fenómeno. Placé de G1 en su campaña de pistas, el zaino que creció en La Biznaga y actualmente ocupa un lugar en la padrillera de Vacación fue Leading Freshman Sire en 2018, y ya es top ten en el ranking general, donde comparte cartelera con su hermano paterno Endorsement, reproductor de La Quebrada y que, si bien sin tanta explosión, se fue consolidando por su solidez.
Un caso sensacional es el del G1 Drosselmeyer que sirviendo en los Estados Unidos y ahora ya radicado definitivamente en Brasil, no tiene fronteras para su enerme generosidad. En Uruguay, sus hijos Vito Corleone, Jump High, Olympic Harvard, Cerro Largo, Great Spirit, Jilly Bean e Hierarquía se han destacado en los máximos planos.
En Perú, Huracán América se llevó el Derby Nacional (G1) y El Puma Carranza es múltiple vencedor de grado, con la particularidad de que ambos nacieron en el Norte.
Y en Brasil, no fue menor hasta ahora el éxito de Distorted Humor, con referencias como los G1 King David, Sea Dream y Jolie Olímpica, ya ganadora en Santa Anita Park del Las Cienagas Stakes (G3) y segunda en el Buena Vista Stakes (G2), en sus únicas dos salidas allí a la fecha.
Por el lado de Perú, no sólo a través de Drosselmeyer sobresale Distorted Humor. En 2019, el líder entre los reproductores de primera generación fue su hijo Westow -sin campaña, pero en la G1 Sightseek (Distant View)- y en 2020 esa posición la ocupa Power World, este doble placé de grupo a los 2 años en la Unión y que disfrutó recientemente del 1-2-3 en el Clásico El Estreno, de Monterrico.
Antes, Spin Master había aparecido con fuerza, ya como padre de los ganadores clásicos Maggie Lee, Spumone, Inescrupuloso, Omarillo, Schetan, Soda Stereo y Sweet Dani.
En lo que a Chile respecta, el desarrollo de la línea paterna encabezada por Distorted Humor, que produjo a la estupenda campeona Paquita Coqueta, y también a los graduales Peumayen, Querida Vieja, Vaya Con Fe y Nuhdis.
Si hay una característica común es la precocidad en los hijos de Distorted Humor que han tenido éxito en esta parte del mundo, con el dato para nada menor que de luego extienden esa capacidad hasta correr también distancias largas, sin distinción de pistas.
Velocista espectacular, Distorted Humor es uno de los pocos reproductores en el mundo que han superado los 100 ganadores clásicos en el haras, y hoy, a los 27 años, sigue activo desde la padrillera de WinStar Farm, con un costo de US$ 50.000 el servicio, con buena vigencia, por cierto.
Lo paradójico es que en los Estados Unidos sus crías no han logrado destacarse como padrillos, haciendo la salvedad de que algunas de las más importantes, como Funny Cide, Commentator o Joking, eran castrados.
Distorted Humor encuentra en Sudamérica un terreno propicio para la extensión de su línea paterna, en una historia que recién comienza…