El mejor 2 Años de 2015 llegará en pocos días a La Pampa; físico, pedigree y campaña en un prospecto muy interesante

La estadística nacional de padrillos muestra hoy por hoy 3 caballos nacionales entre los 5 primeros, y, si de “freshman sires” se habla, los 4 más encumbrados también tienen el sello “made in Argentina”. Se sabe, el caballo nacional bueno es generoso en la función reproductiva, y su éxito o fracaso dependerá en mucho del apoyo en cuestión de calidad y cantidad de madres que reciba.

Ha sido una constante en la historia hípica nacional, y no hay que irse demasiado lejos en el tiempo para apelar a ejemplos como los de Not for Sale (Parade Marshal), o las yuntas padre e hijo de Cipayo (Lacydon) y Fitzcarraldo, Farnesio (Good Manners) e Intérprete, y Potrillón/Potrillazo y Ahmad (Good Manners); sólo por nombrar algunos.

Pues bien, uno de los destacados ejemplares locales de actuación cercana acaba de ser retirado de la competencia y está listo para iniciar su carrera como padrillo. Se trata de Touareg, el Campeón 2 Años Macho de 2015, que acerca la fórmula soñada: físico, pedigree y campaña.

El hijo de Easing Along y Jazz Tradition (Dixieland Band) está llegando en las próximas horas a la provincia de La Pampa para cubrir en el Haras El Caldén, propiedad de Salvador, Lito y Gustavo Scarpello, este último, el preparador que sacó lo mejor del zaino que defendió la chaquetilla del Stud Mi Metejón, de Gastón Arqueros, que también será parte de este desafío.

“Lo tuve en el stud y se perfectamente todo lo buen caballo que fue, entonces, ¿cómo no darle una oportunidad? No es fácil conseguir un padrillo con semejante genética, quizás una de las mejores en Argentina, perfecto de físico y tan corredor. Tenemos una ilusión grande de que transmita y de contar con un gran apoyo en la zona, muy competitiva de un tiempo a esta parte”, suma Gustavo a la charla, feliz por poder llevar a su campeón a la cabaña donde también trabajan el generoso South Kissing (Southern Halo) y Jurabas Tu (Mutakddim).

Touareg debutó ganando a los 2 años en Palermo sobre 1400 metros, y de inmediato sumó el Clásico Pedro E. y Manuel A. Crespo (G3-1500 m). Como candidato corrió el Gran Premio Montevideo (G1-1500 m) y su triunfo fue categórico, batiendo por 2 cuerpos a Liberty Holiday (Harlan’s Holiday).

Un problema físico le hizo dejar su condición de invicto en el Juvenile (G1), y cuando volvió conquistó el Especial Sideral. Previa prueba infructuosa sobre 2000 metros, Touareg alcanzaría su segundo gran triunfo al quedarse con el Gran Premio de las Américas – OSAF (G1), en la milla porteña. A partir de allí, por más que sumó algunos arrimes graduales, ya no volvería a ser el mismo, con un par de pruebas aisladas de regresarlo a las competencias.

Continuador de la línea de Storm Cat, el caballo que se crió en el Haras Chenaut es uno de los mejores hijos de Easing Along, que se empieza a mostrar como un padre de padrillos promisorio de la mano de Interaction, Compasivo Cat y, por estos días, Suggestive Boy.

La línea materna del nuevo reproductor de El Caldén es soñada. Jazz Tradition, su madre, es hija de la campeona Potridee (Potrillazo), hermana entera de las también G1 Potrichal, Potrinner y Potrizaris, y materna de otro vencedor en máxima escala como Potro Rex (Potrillón), en la famosa familia “de los judíos” del Haras Ojo de Agua y que también tiene en sus diferentes ramas nombres como los de los notables Magnetic Eyes (Sky Classic), Querida Rebeca (Exchange Rate) y Tough Golda (Tough Critic).

La familia Scarpello y Gastón Arqueros se embarcan en la aventura de desarrollar un padrillo. No es una tarea fácil, pero sí es cierto que cuando de por medio hay un campeón como Toaureg, con tantos aspectos fuertes como prospecto, la historia adquiere carácter de sueño con apoyo fuerte. Allá irá el zaino entonces, dejando las pistas donde brilló para buscar “éxitos diferentes”.

Diego H. Mitagstein