El hijo de Il Campione se impuso de punta a punta en los 2400 metros de arena del Clásico Calidoscopio (L)

De punta a punta, imponiendo un ritmo interesante y con claridad, El Darwin concretó lo que casi todos esperaban y se quedó con el Clásico Calidoscopio (L-2400 m, arena normal), la prueba que abrió el doblete jerárquico que incluyó la jornada del miércoles en el Hipódromo de San Isidro.

Como había ocurrido hace unas pocas semanas en ocasión del Clásico Domingo Faustino Sarmiento (L), bajo idénticas circunstancias a las de ahora, el caballo del Stud La Frontera ratificó su excelente momento y da la sensación de que ya está listo para empresas más bravas.

Con Francisco Leandro en sus riendas, y cargando el peso máximo de 58 1/2 kilos, el hijo de Il Campione impuso su propia marcha con parciales sostenidos de 22s96/100, 48s98/100, 1m13s82/100, 1m38s20/100 y 2m3s92/100 y remató con la energía suficiente como para vencer por 1 cuerpo a Mikonos Beach (Treasure Beach, 58), que se arrimó en la cuadra final, aunque sin poner nunca en aprietos al ganador. 

Al anca fue tercero Luminoso Dubai (E Dubai, 58), con Estruendoso Dubai (E Dubai, 56 1/2) cerrando la marcha a 8 largos, siendo este el único que durante el desarrollo intentó presionar a El Darwin, aunque pagando el precio luego. El tiempo final de la carrera fue de 2m30s16/100, aceptable.

Criado por el Haras El Paraíso y defensor de la caballeriza La Frontera, El Darwin es preparado en La Plata por Luciano Cerutti y tiene por madre a Brandha (Incurable Optimist), sin campaña de pistas pero muy generosa en la cabaña, como que también produjo a la doble G3 Sommerwind (Sebi Halo), al placé de grupo Es de Temer (Il Campione) y a los también ganadores Angiolísimo (Angiolo) y Angelicci (Angiolo).

Para El Darwin fue la quinta victoria de su campaña sobre un total de 13 presentaciones, totalizando en premios casi 6,5 millones de pesos. Poco a poco se afirma en la larga distancia y ahora el futuro podría tenerlo como uno de los participantes del Gran Premio Dardo Rocha (G1), la prueba más importante de cada temporada en el Bosque.