Regirá a partir del 1 de agosto y se suma al decretado la última semana por Palermo; ¿La Plata seguirá el mismo camino?

A través de sus redes sociales (los partes a los medios ya parecen no ser necesarios, con lo que la prensa debe “salir a buscar” la información…) el Hipódromo de San Isidro anunció este miércoles que a partir del 1 de agosto sus premios aumentarán en un 15 por ciento, aunque sin aportar mayores detalles sobre si la decisión comprenderá la totalidad de las condiciones, es decir, comunes, handicaps y clásicos.

La novedad resulta lógica luego de que la última semana el Hipódromo Argentino produjera una mejora de entre el 15 y 20 por ciento en sus recompensas, quedando bastante por encima de los números aportados por el Jockey Club, que ahora reducirá esa diferencia.

Según especifica el banner, todo se produce a partir de la reapertura de los bingos y casinos en el territorio de la provincia de Buenos Aires y que aportan para el fondo de reparación que tanto San Isidro como La Plata, Azul y Tandil reciben para volcar en sus carreras.

La suba, al igual que la ejecutada por Palermo, sólo “acomoda” un poco la economía de los propietarios, y todavía está lejos de los premios que se entregaban antes del último cese por las restricciones -duró dos semanas-, y que, como se recordará, fue causante de un recorte muy importante en las bolsas, automático, dicho sea de paso.

El gran problema por el que atraviesan los dueños de caballos es que los costos se han ido muy arriba y resulta imposible mantener las cuentas en orden con estas cifras de por medio. Incluso, los remates y las ventas de caballos se han visto afectadas por todos estos puntos y, por supuesto, por la incertidumbre y la debacle económica permanente del país.

Más allá de todo, el aumento dispuesto es una ayuda leve y que, se aguarda, pronto quede atrás con una nueva mejora. Lo que no se sabe es que hará La Plata, que hoy por hoy está lejísimo de sus “colegas”, sin importarle demasiado esa circunstancia a sus dirigentes de turno.