El notable velocista enfrenta un durísimo reto en el G3 que se disputará sobre 1200 metros en Royal Randwick, ante un poderoso trío de Godolphin
NEW SOUTH WALES, Australia (Especial para Turf Diario).- Después de 30 semanas Tato Key vuelve a correr. El excepcional velocista salvará tan larga inactividad este sábado en Royal Randwick, donde será uno de los 14 participantes que tendrá el Hall Mark Stakes (G3), a disputarse sobre 1200 metros y en el césped.
Caballo espectacular el hijo de Key Deputy que descolló en La Plata -12 de 13 en esa pista…- antes de ser adquirido por el Yu Long Investments y exportado. Primero con base en Dubai, Emiratos Arabes Unidos, y con David Marnane en su preparación el zaino fue segundo en el Jebel Ali Port (G3) y tercero en el Mahab Al Shimaal (G3), para recalar en la caballeriza local de Chris Waller tras fallar en la Dubai Golden Shaheen (G1). Bajo la tutela del preparador de la campeona Winx (Street Cry), Tato Key cumplirá su segunda salida, tras ser noveno en un handicap a mitad de septiembre de 2019.
Con un par de “trials” interesantes, y Jason Colett en sus riendas, Tato Key tendrá como adversario más peligroso al experimentado Kementari (Lonhro), carta de Godolphin y que volvió a las pistas tras mostrarse infértil en la cabaña. Con su mejor éxito en las Randwick Guineas (G1) de 2018, acaba de terminar tercero en el Star Kingdom Stakes (G3) de Rosehill Garden.
La divisa del Sheik Mohammed tendrá otros dos nombres fuertes en los partidores con Deprive (Denman) y Trekking (Street Cry), este último con el BRC Stradbroke Handicap (G1) en su cuenta.
Como He Runs Away (Heliostatic), que tropezó en el barro hace unos días, Tato Key trata de refundar su campaña en Australia. La calidad está de su lado.