Después de una semana de parate, se abren 5 días consecutivos de carreras; el Clásico Malvinas Argentinas (2000 m, arena) encabeza una cuádruple tanda jerárquica imperdible

Llegó el día. Esta vez no hubo que esperar seis meses, sino “sólo” una semana. Vuelven las carreras de caballos en Argentina, como muchísimas actividades que quedaron en stand by ante el endurecimiento de las restricciones y que ahora podrán volver a respirar, aunque no exista garantía de continuidad.

Por lo pronto, sí se sabe que entre lunes y viernes el turf podrá correr y que el próximo fin de semana volverá a quedar en pausa, para otra vez arrancar el 7 y entrar otra vez en acción por 5 días. Luego, todo dependerá del Covid-19, del número de casos, de la cantidad de internados en terapia intensiva y de las vacunas que lleguen y puedan aplicarse. 

Y hay algo que también ya todos sabemos: hasta que pase el invierno todo será intermitente, con la esperanza que ya a partir de septiembre, cuando el frío empiece a aflojar, ir dejando poco a poco detrás está pesadilla interminable y que taladra la cabeza de todo el mundo,

El Hipódromo de Palermo será receptor de esta vuelta, como allá por fines de agosto, después de aquél parate a esta altura inentendible y que puso en jaque la actividad. Habrá 14 turnos por total, y 4 de ellos estarán por encima del nivel común, destacándose el Clásico Malvinas Argentinas (L) y acompañado por los especiales Juan P. Artigas (1600 m, arena) y Julio Félix Penna (1600 m, arena) y también por el Handicap British Empire (1400 m, arena), que se comentan por separado en esta misma edición.

Planteado sobre 2000 metros en la pista principal de arena y para caballos desde los 3 años bajo escala de peso por edad, el Malvinas Argentinas tendrá apenas 6 ejemplares en los partidores, en un lote parejo y que tiene como candidato al tres años Sólo Candombe.

Parte de la positiva primera generación del campeón Winning Prize, el crédito del stud cordobés Dream Star retrocedió algunos casilleros al quedar sexto de Village King (Campanologist) en el Clásico Porteño (G3), pero ahora enfrentará otro tipo de rivales y tiene la posibilidad de lograr su segundo triunfo clásico, tras quedarse con el Fain a mediados de marzo, aunque en la grama porteña.

También potrillo, Evo Revoltoso (Evocado) llega desde las condicionales con la ilusión de volver a mostrarse como cuando cayó por apenas la cabeza ante Master Mayo (Master of Hounds) en la milla, aunque salta a los dos kilómetros y al terreno jerárquico. Su juventud puede darle una mano grande.

Experiencia es lo que le sobra a Elmaestrodelarte (Art Master) y de ella puede agarrarse firme para dejar correr su ilusión de volver a cruzar el disco adelante después de mucho tiempo, para ser precisos, desde que el 16 de febrero de 2020 se quedó con el Gran Premio Vicente Dupuy (G3) en La Punta, San Luis.

J be Storm (J be K) cayó ajustadamente ante Overlord (Endorsement) en esta cancha cuando parecía que no perdía más, y ahora quiere olvidar ese mal trago dando el golpe en un turno bastante más exigente, mientras que Stormy Ruler (Roman Ruler) disfruta de galopar y si bien viene corriendo ante fondistas veteranos y en las comunes, quien dice que no pueda dar el golpe. Completa el breve lote el veterano Ex Tradition (Exchange Rate), doble titular clásico allá por 2018, pero de capa caída últimamente.