La hija de Cima de Triomphe, dueña del Criadores en 2018, estaba preñada por Safety Check

Pablo Maggio no puede ocultar su tristeza por la pérdida de una de las mejores yeguas que crió, pero prefiere mirar hacia adelante, respirar profundo y soñar con encontrar el próximo crack. Murió Sinfonía Fantástica, la tordilla que lo llenó de alegrías y de la que mucho esperaba ahora como madre, tras su retiro la última temporada.

“Tuvo un problema y no se pudo hacer nada. Por supuesto que siempre es un dolor muy grande cuando pasa algo así, pero el turf es así. Mi elección es dejarlo atrás y seguir trabajando por y para el haras, de eso se trata también”, cuenta el criador.

Hija de Cima de Triomphe y La Picardie (Editor’s Note), Sinfonía Fantástica ganó 5 carreras durante su brillante pero breve campaña, siempre al cuidado de Roberto Pellegatta. Ganó el Clásico Omega (G3) y también el Los Haras (G2), pero su momento cumbre llegaría el 1 de mayo de la temporada anterior, cuando sobre 2000 metros y en la arena de Palermo se alzó con el Gran Premio Criadores (G1).

Hubo muchos sondeos para adquirirla por parte de propietarios del extranjero, pero una placa rebelde hizo que la venta jamás se concretará. Sería luego tercera en el Estrellas Distaff (G1) y en el La Mission (G2), antes de ser retirada. La misma posición ocupó en la Copa de Plata (G1) de 2017, cuando pudo haber ganado, y su lista de figuraciones se completó con un segundo en el Clásico La Mission y un tercero en el Clásico Chile (G3).

Con su madre hermana materna de la G1 Peristáltica (Intéprete) y de la ganadora clásica Ciao Amore (Grand Reward), en una sólida familia importada, Sinfonía Fantástica había quedado preñada de un sólo salto por Safety Check (Dubawi) en el Haras La Numancia, y su primera cría iba a nacer en septiembre.