Dale Gaucho, A Media Luz y Dragreen se quedaron con las pruebas centrales, en una tarde de homenajes merecidos en el centro

La del viernes en Palermo fue una jornada a pura emoción, recordando glorias de todos los tiempos entre los jockeys, en un homenaje merecido y que a futuro debe profundizarse, capaz, hasta darle el tono de una gran fiesta, de una fecha en la que el público se siente identificado, como si se corrieran grandes premios.

Hubo tres handicaps dentro de una programación entretenida y que terminó por ofrecer una recaudación interesante de 40.535.621 pesos, pero el dato más saliente, el que más pegó en el público, fue tener en Palermo a tantos jinetes que fueron fuente de finales fantásticos e historias maravillosas. El Negrito Sena, el Sapito Serrudo, el Turco Sahagián… O ese tributo al inolvidable Eduardo Jara, recientemente fallecido y que tuvo una copa en su nombre en el Grandes Fustas (1000 m, arena).

Fue esa prueba la primera de la pierna por encima del nivel común en resolverse, y allí fue Dale Gaucho el que se llevó la victoria y los aplausos, cargando el peso máximo de 61 kilos y superando por apenas la cabeza al siempre generoso Ready to Candy (AP Candy, 60 1/2), tras una lucha que se prolongó durante todo el desarrollo y en la que el hijo de Endorsement siempre mantuvo una pequeña ventaja. Al cuidado de Rodolfo Garcés y con Brian Enrique en sus riendas, el alazán festejó por séptima vez en 30 salidas tras muy buenos 55s52/100.

Un ratito más tarde se dio otro final espectacular en el Handicap Laguna Blanca (1400 m, arena pesada) y donde, como en el tango, todo fue por una cabeza. Ahora las protagonistas fueron A Media Luz (Exchange Rate, 59) y Pura Diabla (Endorsement, 58 1/2), que hicieron delirar a los espectadores prodigándose por completo por el espectáculo. 

Con la mano firme de Gustavo Calvente como “partícipe necesaria”, la yegua de Juan Antonio fue valiente en la recta para doblegar a la puntera La Murguita (Grand Reward, 59) -fue tercera a 1 1/2 cuerpo- y contener las ínfulas de la pareja Pura Diabla con valentía.

Y cerrando la tarde jerárquica fue otro final fantástico el del Handicap Domingo Torterolo, que después de 2500 metros de arena pesada terminó con Dargreen (Greenspring, 57) quebrando en el último salto y por medio pescuezo al valiente Mani Boy (Asiatic Boy, 57), que peleó con todos adelante desde la salida para caer “inmerecidamente” en el suspiro final. Rodrigo Blanco y su habilidad eterna hicieron un trabajo perfecto con el crédito de Marcelo Sueldo, que volvió por sus fueros tras 2m36s29/100.