El hijo de Cima de Triomphe batió por la cabeza a Urban Cat para lograr el segundo y mejor triunfo de su campaña
Todos los gritos tuvieron valor hasta el mismo disco al cabo del Clásico Manuel Anasagasti (L-1400 m, césped), para productos y encargado de abrir el doblete jerárquico de este domingo en el Hipódromo de San Isidro. Fue uno de los mejores finales del año, apasionante, mágico, la síntesis misma de lo que las carreras de caballos pueden generar.
En un margen de poco más de medio cuerpo cinco dos años lo dieron todo en pos de un éxito importante, de trascender, vendiendo carísima la derrota. El ojo del photochart terminó indicando que Ranfañoso fue el dueño de los aplausos, con cabeza, hocico, cabeza y medio pescuezo de ventaja sobre Urban Cat (Hurricane Cat), Capo Beach (Treasure Beach), Most Gero (Most Improved) y Best Change (Freud). Increíble.
Al hijo de Cima de Triomphe e I’m A Mosaic Rocker (Belong to Me) le sentó de perillas volver atrás en la distancia, compitiendo otra vez sobre el mismo tiro en que había escoltado a Boecio (Suggestive Boy) en el Chevalier (G2), tras quedar sólo quinto en el Gran Criterium (G1). Conducido con tremenda efectividad por Wilson Moreyra, Ranfañoso atropelló fuerte en el derecho tras correr de la mitad del grupo para atrás mientreas Best Change y Most Gero (Most Improved) luchaban adelante bajo parciales firmes de 24s64/100 y 47s72/100.
Best Change disparó en el derecho y por un momento pareció que se haría inalcanzable, pero los metros finales se le hicieron largos, permitiendo múltiples cargas y el regreso a la pelea de Most Gero. Entre la maraña de productos, Ranfañoso pudo más y terminó quedándose con el triunfo. Cría de Don Arcángel y propiedad del Stud Adriancito, es preparado por Roberto Caroprese, que disfrutó con su familia una victoria que emocionó a todos, en el recuerdo del fallecido jockey, al que la caballeriza recuerda con cariño.