El ascendente hijo de Camelot buscará este sábado quedarse con la versión 2020 del Epsom Derby; Kameko, ganador de las Guineas, aspirante a la Triple Corona

EPSOM DOWNS, Inglaterra (Especial para Turf Diario).- El Epsom Derby en su edición de 2015 tendrá 15 potrillos en los partidores. Será este sábado, en Epsom, como parte de otro fin de semana excepcional a nivel internacional, un bálsamo para quienes en Argentina no pueden disfrutar del turf desde hace ya casi 4 meses, cuarentena sin fin mediante.

Poco antes del mediodía en Sudamérica los sueños girarán Tattenham Corner para emprender esa recta final con tanta historia; esa subida hacia la gloria, en pos de llegar adelante al disco preciado, a la foto inolvidable. Continuidad de una temporada rara, con un proceso selectivo en el viejo continente “apurado” y que sólo se irá acomodando con el paso de las semanas, los 3 años pugnan por hacerse grandes.

Desde 1780 se corre el Derby en Epsom -salvo en el período de la guerra, cuando la sede fue Newmarket-, el paso intermedio de la Triple Corona inglesa que se inicia con las 2000 Guineas (G1) en Newmarket y que finaliza con el St. Leger (G1) en Doncaster. Hay un aspirante a la serie en 2020: Kameko (Kitten’s Joy), que buscará cortar la sequía ya que desde 1970 ningún tres años logra conquistarla, con la figura sublime de Nijinsky (Northern Dancer) cada vez más lejana y más gigante en el tiempo. Si será difícil que en 50 años ni un zaino, ni un alazán ni un tordillo ha podido…

Atendido por Andrew Balding para el Qatar Racing, y con Oisin Murphy como jinete, Kameko no es el favorito en la previa, posición que cede a la ascendente figura de English King, considerado más apto para desandar la milla y media, aunque con el deber de confirmar que puede ser mucho más que una promesa.

Portando los mismos colores que Stradivarius (Sea the Stars), los de Bjorn Nielsen, el pupilo de Ed Walker buscará repetir la hazaña de Camelot (Montjeu), su padre, que levantó la copa en 2012, consiguiendo dos triunfos en la Triple Corona, pues también se llevó las Guineas.

English King, para el que se requirieron los servicios de Frankie Dettori, fue séptimo debutando en la milla, pero desquitó rápido en los 2000 metros de Newcastle sobre el cierre de 2019 para reprisar ganando con solvencia en Lingfield el Betsafe Derby Trial Stakes (L), sobre 2200 metros.

Como en el Irish Derby, Aidan O’Brien y Coolmore atacan con todo. Nada menos que seis de sus potrillos estarán en los partidores, con el dato de que Ryan Moore, el jockey oficial, prefirió a Mogul  (Galileo), cuya vuelta en el King Edward VII Stakes (G2) de Royal Ascot lo mostró muy por debajo de lo esperado, quedando apenas cuarto de Pyledriver (Harbour Watch), con el que se volverá a enfrentar ahora.  Mohican Heights (Australia), tercero en esa prueba, también será de la partida.

Russian Emperor llevará a Seamie Heffernan en su montura, y O’Brien le tiene confianza después de verlo resurgir de una derrota inesperada con un éxito en el Hampton Court Stakes (G3) del mitin real. Y la presencia de Vatican City (Galileo) invita al optimismo de la casa irlandesa después de verlo descontar en el final las Tattersalls Irish 2000 Guineas (G1) en Irlanda, cuando terminó segundo a 1 3/4 cuerpos del invicto Siskin (First Defence).

Ya un escalón más atrás aparecen Highland Chief (Gleneagles), Serpentine (Galileo), Khalifa Sat (Free Eagle), Emissary (Kingman)Worthily (Point of Entry), Max Vega (Lope de Vega), Mythical (Camelot), Amrhan Na Bhfiann (Galileo) y Gold Maze (Golden Horn), completando una lista tan entretenida como pareja.

Se viene el Epsom Derby 2020. Habrá más historia de por medio, aunque con las tribunas vacías como escenario en parte triste. Será cuestión de disfrutarlo, como siempre. Como la gran carrera que es.