El caballo argentino recibió una conducción formidable por parte del chileno Héctor Berríos y le dio su segundo triunfo en la carrera a Pozo de Luna, que había ganado con Suggestive Boy en 2012

El gran momento por el que atraviesan los caballos sudamericanos en el norte vivió un fin de semana estupendo. El sábado en Woodbine, Canadá, el brasileño Filo di Arianna (Drosselmeyer) ganó el Connaught Cup Stakes (G3) -como se comenta por separado en esta mnisma edición-, y, ya cuando el domingo iba terminando, en Del Mar, Estados Unidos, el argentino Irideo consiguió una victoria espectacular en el Wickerr Stakes (L-1600 m, césped, US$ 100.000 en premios), de la mano de la dupla chilena conformada por el entrenador Marcelo Polanco y el jockey Héctor Berríos, que hizo magia en sus riendas.

En un premio a la paciencia, el notable caballo del Haras Pozo de Luna, del mexicano José Cerrillo, fue una saeta en la recta final para avanzar por dentro y desde la zaga y quedarse con el triunfo en los metros finales, filtrándose por un espacio pequeño y adelantándose por 3/4 de cuerpo sobre el gran favorito Gregorian Chant (Gregorian), con Bran (Muhaarar) en la tercera posición a la cabeza.

A un sport de US$ 65, como el tercero que más pagaba dentro del grupo de 11 participantes, el hijo de Easing Along y la campeona Infiltrada (Footstepsinthesand), Irideo ratificó lo bueno que venía de mostrar en Santa Anita Park, cuando había llegado segundo en una condicional, pero sobre 1300 metros.

Ahora, en la distancia y pista que en diciembre de 2020 lo vieron consagrarse en el Gran Premio Joaquín S. de Anchorena (G1) del Hipódromo de San Isidro, Irideo logró su primer festejo sobre 4 salidas en los Estados Unidos, después de recuperarse de algunos problemas que lo invadieron cuando hace ya casi un año estaba listo para estrenarse en esas tierras. Para Pozo de Luna fue la segunda victoria en el Wickerr Stakes, pues también se quedó con el trofeo en 2012 con Suggestive Boy (Easing Along).

“Le tomó muchísimo tiempo aclimatarse, no es un caballo fácil de entrenar. Pero después de su última carrera se despertó”, contó Polanco, feliz, en un momento de su carrera en el que de la mano de Pozo de Luna y sus caballos consiguió volver a los primeros planos, pues también tiene a su cargo a Blue Stripe (Equal Stripes), con la que esta  temporada ya ganó el Santa Margarita Stakes (G2), para luego terminar segunda en el Santa María Stakes (G2).

Berríos, después de una temporada muy productiva en Gulfstream Park, se mudó a la costa oeste y tiene como agente a su compatriota José Santos, otro látigo formidable surgido del otro lado de la Cordillera. Seguramente su gestión con Irideo le reportará conseguir más montas en los días por venir, sobre todo pensando que Del Mar es un mitín con varios clásicos sobre el césped.

Ahora ganador de 5 carreras sobre 10 corridas, Irideo sumó por su triunfo en el Wickerr Stakes 65.000 dólares en premios, más de lo que había logrado en sus 9 gestiones anteriores. En el historial de la carrera, ahora es el zaino, que fue castrado en los Estados Unidos, es el cuarto ejemplar nacido en argentina y llevarse la copa, después de las victorias conseguidas por Companion (Babas Fables) en la edición inaugural de 1990, de Suggestive Boy (Easing Along) en 2012 y de Indy Point (Indygo Shiner)en 2013. El otro sudamericano que venció fue el brasileño Joe Who (Jolly Quick), en 1998.

Irideo se suma al grupo de grandes esperazas argentinas y sudamericanas para el segundo semestre en los Estados Unidos que viene pintando lindo…