Nieta de la fabulosa Griffe de París, se impuso en el Clásico Espirita (L) en el domingo de San Isidro

El proceso madurativo de Gringa Unica encontró este domingo en el Hipódromo de San Isidro su punto más alto hasta el momento. Respondiendo también a cuestiones genéticas y aprovechando el nivel superlativo que viene mostrando desde hace unas semanas Altair Domingos, la hija de Cityscape fue puro coraje para ganar el Clásico Espirita (L-1800 m, césped), cortando el vuelo de la puntera Elekta (Violence) al promediar el derecho y conteniendo la potente arremetida de Muy Tímida (City Banker), a la que venció por apenas media cabeza, con Elekta en tercero a medio largo más.

En su primer intento más allá de las condicionales, nivel donde venía de conseguir una linda victoria, la reservada de La Providencia que pone a punto Pedro Nickel Filho comenzó de a poco a abandonar la regularidad que la venía acompañando para transformarse en un proyecto más que interesante de buena fondista.

Superada una larga reprise, Gringa Unica es otra con respecto a la que se mostró durante su primera campaña. Mucho más fuerte, adulta, capaz de rendir por fin al máximo y respondiendo al buen concepto que siempre mereció.

La alazana es una pieza con pedigree real pues Gringa Nativa (Orpen), su madre, es ni más ni menos que hija de la fenomenal Griffe de París (Telescópico), que produjera a los G1 Global Hunter (Jade Hunter), Lady de París (Nugget Point) y Genereux (French Deputy), del G2 House of Lords (Fast Gold), del G3 King de París (Nugget Point) y de los vientres o abuelas de los campeones y G1 Ollagua (Pure Prize) y Touriga (Put It Back).

Hermana materna de la G1 Greta G. (Exchange Rate), Gringa Unica empezó a dar todo lo que puede y da la sensación de que verla en los titulares nuevamente en el corto plazo no parece una utopía.