El crack argentino terminó tercero en el durísimo Ft. Lauderdale Stakes (G2), en Gulfstream Park
MIAMI, Florida (Especial para Turf Diario).- Hi Happy es un campeón. Y se encargó de demostrarlo en casi todas sus presentaciones de 2018, temporada que cerró este sábado en Gulfstream Park con otra labor acorde con su enorme categoría. A poco más de un mes de su aceptable paso por el Breeders’ Cup Turf (G1) de Churchill Downs, el alazán de La Providencia consiguió un gran tercer puesto en el durísimo Ft. Lauderdale Stakes (G2-1800 m, césped, US$ 200.000 de bolsa), a 3 1/4 cuerpos del irlandés Glorious Empire (Holy Roman Emperor), que se impuso de punta a punta.
Varios buenos caballos quedaron detrás del hijo de Pure Prize, como el caso de Divisidero (Kitten’s Joy), Almanaar (Dubawi), Zulu Alpha (Street Cry) y Blacktype (Dunkerque), el caballo francés que lo batió en el Knickebocker Handicap (G2) y que ahora terminó undécimo.
Conducido por Luis Sáez, y en una distancia que no es la que mejor le sienta, Hi Happy persiguió siempre al puntero, cediendo la segunda posición en los 50 metros finales, cuando desde atrás cargó Qurbaan (Speightstown) para dejarlo a 3/4 de cuerpo, a 2 1/2 largos del ganador.
El Ft. Lauderdale Stakes tuvo otra presencia sudamericana en el brasileño Quarteto de Cordas (Rock of Gibraltar), que voló bien bajito para terminar anteúltimo. Titular del último Grande Premio Brasil (G1), habrá que ver si su campaña continúa en los Estados Unidos, en los Emiratos Arabes Unidos para el Carnaval de Meydan o en Singapur, de donde son sus actuales propietarios.
Para Hi Happy ahora se abre con total justicia una puerta de cara hacia la edición inaugural de la Pegasus World Cup Turf Invitational (G1), sobre 2200 metros y en el césped y repartiendo 7.000.000 de dólares en premios. Como informó hace algunas semanas Turf Diario, hay conversaciones con posibles socios para que el crack esté presente en semejante compromiso.
