La potranca de Santa María de Araras debutó recién en diciembre último y este sábado se quedó con el Clásico Omega (G2)
Habrá que ver hasta dónde es capaz de llegar Hony Boone, la gran ganadora que tuvo este sábado en el Hipódromo de San Isidro el Clásico Omega (G2), disputado sobre la milla de césped. Como Handsome Banker (City Banker), proveniente de los handicaps, la reservada de Santa María de Araras estuvo impecable en todo momento, liderando a placer y acelerando fuerte en la recta para encabezar el 1-2-3 de la cabaña como criador, pues terminó superando por 3 cuerpos a Canta Bonita (Aerosol), mientras su compañera Tropeadora (Daniel Boone) era tercera a medio largo.
Con debut tardío, a fines de diciembre último, la zaina preparada por Carlos D. Etchechoury ha tenido hasta aquí una campaña tan ascendente como avasallante, quemando etapas con perfección. Salió de perdedora rapidito, pagó el derecho de piso entre ganadoras, repitió, luego se llevó el Handicap Rafale y ahora le dio un salto de calidad a la historia, ubicándose dentro del grupo de las mejores de la media distancia, aunque da la sensación de que su futuro puede estar en los dos kilómetros, pensando en la Copa de Plata (G1).
Santa María de Araras se ha “cansado” en las últimas décadas de sacar yeguas buenas, y Hony Boone está trabajando para sumarse a ese lote, entre las de arriba. En el Omega corrió relajada adelante y cuando en el derecho llegó la hora de acelerar, ninguna pudo hacerlo con más efectividad que ella. Martín Valle la exigió y respondió repeliendo todos los ataques, poniéndose cómoda en la cuadra final, hasta cerrar en una marca de 1m34s93/100, de las mejores del día.
El Omega tuvo también decepciones varias, comenzando por la yunta de La Esperanza integrada por Baronesa Asiática (Asiatic Boy) y Saragossa City (Seek Again), que venían de llegar 1-2 en el Las Heras (G3) y aquí estuvieron lejos de reptir.
En el formidable pedigree de la francesa Blessings (Floribunda), el de Sings (Utópico), Bleding (Utópico), Big Board (Lode), Honey Rose (Lode) y Hole In One (Heliostatic), todos ganadores de G1, Hony Boone pisó fuerte en la milla de San Isidro, tuvo una actuación redonda y genera ilusiones de llegar lejos. El tiempo tendrá, como siempre, la última palabra.
