La yegua brasileña da varias revanchas en el Clásico Los Haras (G2), donde La Validada será una rival de riesgo también

Una reunión imperdible ofrecerá este viernes el Hipódromo de San Isidro, con la calidad como bandera y el paso super interesante que propone el Clásico Los Haras (G2-2000 m, césped), uno de los últimos preparatorios para las yeguas mayores allí antes de que llegue el momento del Gran Premio Copa de Plata (G1), en diciembre.

Allí se dará la revancha de lo ocurrido hace casi 2 meses en el Clásico La Mission (G2), cuando la brasileña Justify My Love saltó a los primeros planos de la división con una clara victoria por 1 1/2 cuerpos sobre Doña Gota (John F Kennedy), con la que ahora se volverá a enfrentar. No serán las únicas “sobrevivientes” de esa tarde, pues Wild Ones (Cima de Triomphe) y Our Little Girl (Heliostatic), cuarta y quinta en esa prueba, también estarán en los partidores, como para terminar de aclarar los tantos.

Para todas ellas el riesgo grande lo aportará la porteña La Validada, que abandona la arena por primera vez en su campaña para desembarcar en el césped y volver a los 2000 metros, la distancia en la que había terminado segunda de Mumy Beach (Treasure Beach) en el Gran Premio Selección (G1) antes de ser distanciada por tratamiento.

Luego ganadora del Clásico Inés Victorica Roca (G3), la hija de Valid Stripes quedó tercera de Escabiar (Portal del Alto) en el Clásico Ricardo P. Sauze (G3) cuando corrió por última vez, pero no se la vio en plenitud. Si rinde en su máximo nivel, sin dudas habrá que aguandarla cuando aparezca fuerte en el derecho.

El Haras Pozo de Luna apuesta por la experimentada Henestrosa (Treasure Beach), que después de quedarse en el comisariato por sobre Marquesa Key (Key Deputy) el Clásico Ignacio e Ignacio F. Correas (G2) fue séptima ante los machos en el General Pueyrredón (G3) y flojita quinta en el Chile (G2), cuando volvió a medirse con las de su género.

El grupo lo completa Pinta Milonguera (Cima de Triomphe), que supo ser tercera de Fanciful (Heliostatic) y la mencionada Henestrosa en el Clásico Apertura (G2) para luego ir desdibujándose, más allá de alguna victoria condicional.