El crack chileno tendrá 13 rivales este sábado en la importante prueba de Saratoga
SARATOGA SPRINGS, New York (Especial para Turf Diario).-La hípica chilena está en las nubes tras la impactante victoria del campeón Robert Bruce (Fast Company) en el Arlington Million (G1). Pero va por más. Será este sábado, en Saratoga, con Kurilov asumiendo un durísimo reto en el tradicional Woodward Stakes (G1-1800 m), una de las pruebas que suelen proyectar hacia el Breeders’ Cup Classic (G1).
Atendido por Chad Brown y con José Ortíz confirmado para conducirlo, el hijo de Lookin At Lucky tendrá 13 rivales. Su último antecedente lo vio secundar desde la cabeza a Realm (Haynesfield) en el Alydar Stakes, también sobre los 1800 metros de tierra en el hipódromo local, recuperándose de su previa baja performance en el United Nations Handicap (G1) de Monmouth Park, aunque en la grama.
El Woodward Stakes tendrá en sus partidores a varios de los mejores caballos adultos del momento, tal el caso de Seeking the Soul (Perfect Soul), ganador del Clark Handicap (G1) en 2017 y que acaba de reprisar con un segundo en el Michael G. Schaefer Memorial Stakes (L) de Indiana Grand.
Otro nombre fuerte es el de Gunnevera (Dialed In), de intereses venezolanos, y que luego de su pobre paso por la Dubai World Cup (G1) volvió al ruedo en una condicional de Gulfstream Park galopando a placer al chileno Leitone (Dunkirk). Uno de los mejores potrillos de la temporada anterior, tiene ahora la oportunidad de volver a los primeros planos.
El japonés Yoshida (Heart’s Cry) se impuso hace 3 meses en el Old Forester Turf Classic Stakes (G1), y no puede olvidarse de ninguna manera que Tapwrit (Tapit) venció en el Belmont Stakes (G1) de 2017 y viene de quedar cuarto en el Whitney Stakes (G1).
El Woodward Stakes se comenzó a correr en 1954 y, desde entonces Lido Palace (Rich’s Man Gold) fue el único sudamericano en ganarlo, en 2001 y 2002. ¿Podrá Kurilov repetir su hazaña?