La milla del Oswaldo Aranha (L) promete un espectáculo de elevado nivel técnico

LA PLATA.- Carrerón el Clásico Oswaldo Aranha (L-1600 m, arena), la prueba más importante del jueves en el Bosque y donde se medirán caballos de 3, 4 y 5 años. No es normal que en una prueba de este nivel se den cita tantos ejemplares con antecedentes en el máximo nivel.

Por caso, en los partidores estarán Atiko Rye (Catcher In the Rye) y Luk Joy (Fortify), que llegaron en ese orden y separados por apenas el pescuezo del cuestionado Classic Rye (Catcher In the Rye) -como se informó esta semana, dio positivo en el control antidoping- en el Gran Premio Joaquín V. González (G1), la tarde del Dardo Rocha (G1).

No sólo aquellos aspiran a tener el protagonismo máximo, pues también será de la partida el porteño Expressive Smart (Expressive Halo), ni más ni menos que el último héroe del Gran Premio Estrellas Mile (G1). El alazán preparado por María F. Alvarez y Walter Suárez falló inesperadamente en el Gran Premio San Isidor (G1), llegando en el décimo tercer puesto, por lo que ahora buscará rehabilitarse jugándose desde temprano, tal cual es su característica.

Pero hay más, pues se anima otra vez ante los mayores el potrillo Sidney Lima (Sidney’s Candy), listo para aportar pimienta al trámite y con la idea de recuperarse tras bajar la guardia en el González. Le sobra roce como ganador del Clásico José Pedro Ramírez (G3) y dueño de un rosario de arrimes en el máximo plano.

También su cuota de categoría aportará The Last Ilusion (Interaction), dueño de los clásicos Fin de Año y Antonio Cané (G3) y que se despidió a fines de septiembre con un cuarto puesto en el Clásico Italia (G3) de Palermo.

Ante semejantes nombes, True Champ (True Cause) queda un poco retrasado en las consideraciones y buscando sorprender.