El hijo de Manipulator fue implacable en la recta final, dando cuenta fácilmente del norteño El Póker de Ases; Western Camp fue sólo quinto tras luchar adelante

LA PLATA.- El camino ascendente de Largo Man encontró este martes el punto más alto hasta el momento. Con el por poco tiempo más aprendiz Gonzalo Borda en sus riendas, el potrillo presentado por Mauro Castellazzi se impuso sin mayores inconvenientes en el Clásico Nigromante (1600 m, arena normal), la otra de las pruebas importantes que incluyó la jornada sureña.

Previo segundo de Western Camp en el Clásico Prince, el defensor del Stud La Peladilla se tomó revancha de ese rival, que esta vez no rindió en el mismo nivel para terminar apenas quinto y sin poder completar el anhelado “doblete clásico” del Stud Rodolfo Pedro, que un rato antes se había llevado el Hipódromo Independencia de Rosario (G3) con Paliza Salvaje (Lizard Island).

Fue justamente este último el que vino al frente, aunque sosteniendo una lucha con El Póker de Ases (Il Campione) y que lo terminaría condenando a perder fuerza en el derecho. Fue allí cuando apareció en escena de lleno el vencedor, que no había corrido demasiado lejos tampoco, nunca más allá del tercer lugar.

Encimó en la parte final del codo Largo Man, que por los 250 metros superó a El Póker de Ases para, de allí en adelante, comenzar a estirar ventajas que, en el disco, serían de 3 cuerpos sobre ese mismo rival, con Saint Luis (Full Mast) cruzando tercera a otros 3 largos, todo tras muy competitivos 1m37s24/100.

Largo Man se convirtió en el ganador clásico número 35 en el país para Manipulator, su padre, y tiene por madre a Largamira (Mad Champ), que ya había producido a la placé clásica Mirá Quien Viene, ambos nacidos y criados por el Haras Cortines.