El crack debutará este jueves en Churchill Downs, donde la lluvia es una preocupación; tendrá 9 rivales sobre la milla de césped; la palabra de Paulo Lobo

LEXINGTON, Kentucky (Especial para Turf Diario).- Este jueves llegará el momento del debut en las pistas de los Estados Unidos para el crack Ivar, brasileño de nacimiento pero que cimentó su “fama” en las pistas de San Isidro y Palermo, en Argentina, donde, indudablemente, fue el Campeón 2 Años de la última temporada.

Casi un año de inactividad enfrentará el bellísimo zaino que Paulo Lobo entrena ahora para la sociedad conformada por el Stud RDI LLC y el Bonne Chance Farm LLC., em cuyas riendas estará el experimentado jockey francés Julien Leparoux.

El hijo de Agnes Gold y May Be Now (Smart Strike) animará la novena carrera de este jueves en el mítico Churchill Downs, un allowance optional claiming de 80.000 dólares y con US$ 85.000 en premios a repartir que se correrá sobre una milla e, inicialmente, en el césped.

Justamente allí radica una de las grandes dudas para Paulo Lobo, pues el clima no viene ayudando en la zona y las lluvias abundan en el pronóstico: “La verdad es que el tiempo está complicado por aquí y sólo decidiremos en la mañana de la carrera si correremos o no en caso de que se pase a la arena”.

Lobo, hombre de experiencia amplia y que forjó caballos de la jerarquía de Farda Amiga (Broad Brush), Pico Central (Spend a Buck), Gayego (Gilded Time) y Molengao (Royal Academy), está tranquilo y esperanzado en la previa, con una única preocupación en las nubes que revolotean…

“Ivar siguió muy bien. El sábado hizo 800 metros en 49s y moneditas con mucha facilidad y me confirmó que está listo para competir. Realmente se lo ve 10 puntos”, cuenta el profesional sobre el ganador de los grandes premios Gran Criterium (G1) y Estrellas Juvenile (G1) de 2019.

Con plan original para hacer su estreno en el suspendido mitin de Keeneland, en abril, alterado, agrega Lobo: “Está lindo, contento, sano… Creo que va a tener una gran carrera. Nunca se sabe qué puede pasar aquí con los caballos sudamericanos, porque la adaptación jamás es fácil, siempre es recomendable correr y después analizar para hacer más planes. Pero estamos bien”.

Sobre la carrera, resume: “Es durísima”, para luego ampliar: “Si se corre en el césped, hay un par de caballos ganadores de grupo muy complicados; y si se cambia a la arena hay otros de mucho roce, incluso con participación en la Breeders’ Cup. Será un reto complicado, sin dudas”.

Son 10 los anotados para la carrera, con otros 6 participantes en condición de suplente. Tan dura es que a pesar de sus pergaminos Ivar está cotizado 12/1 en el morning-line, en séptimo término.

El enorme favorito es Front Run the Fed (Fed Biz), pupilo de Chad Brown al que dirigirá Javier Castellano y que no corre desde octubre. Después de tres triunfos al hilo, serie que incluyó el Better Talk Now Stakes (L) de Saratoga, se despidió siendo segundo en el English Channel Stakes (L) de Belmont Park, a medio cuerpo de Seismic Wave (Tapit).

Michael Maker apuesta por Mr. Dumas (Majesticperfection), que buscará volver a su mejor nivel después de tres malas performances. Cabe recordar que aquí supo quedarse con la última versión del Commonwealth Turf Stakes (G3).

No le va en zaga a los anteriores Casa Creed (Jimmy Creed), al cuidado de Bill Mott y que cuando se despidió en agosto último en Saratoga lo hizo venciendo nada menos que en el National Museum of Racing Hall of Fame Stakes (G2)…

Entre los suplentes están Lone Sailor (Majestic Warrior) y K J’s Nobility (Primary Suspect), y ambos sólo entrarán en la carrera si se hace en la arena. El primero supo ganar el Oklahoma Derby (G3) en 2018, además de arrimar en una infinidad de turnos fuertes y de ser sexto en el Breeders’ Cup Classic (G1) de aquella temporada. El restante viene teniendo un 2020 por demás productivo, como que ganó el Nodouble Breeders’ Stakes (L) para, finalmente, terminar segundo en el Arkansas Breeders’ Championship Stakes, siempre en Oaklawn Park.

Llega el momento de la verdad para Ivar. La hora de ratificar su condición de caballo diferente en una de las hípicas más competitivas del mundo. Está con los 10 puntos y Paulo Lobo le tiene absoluta confianza, como para soñar con una gran tarde en Churchill Downs para el turf sudamericano. Si el tiempo lo permite, claro…