El hijo de Catcher In the Rye salió de escena tras el Unzué de diciembre; cargará el peso máximo de 62 kilos

Sin demasiadas luces transcurrirá la reunión de este lunes en el Hipódromo Argentino de Palermo, donde Juan Alberto Maciel, la Fiera, tendrá su homenaje anual con un especial en su nombre. El jockey de New Dandy (New Noble) y Salvalte Tel (Telefónico), entre otros grandes caballos, el de la dupla infalible con el inolvidable Derli A. Gómez, y uno de los últimos grandes referentes entre los látigos surgidos en el Bosuqe, seguramente dará el presente para entregar los premios, recibiendo, como siempre, mil saludos a su paso.

Con 1200 metros de recorrido, 1 millón de pesos en premios para el ganador y en la arena, la carrera está abierta para caballos desde los 5 años, ganadores, tendrá de por medio la reprise de un buen caballo como Lorenzo Rye (Catcher In the Rye), que no por nada cargará el peso máximo de 62 kilos. 

Inactivo desde hace 170 días, salió de acción tras fallar en el Unzué (G1) de San Isidro, pero en su labor anterior había sido tercero de Labrado (Le Blues) en el Gran Premio Maipú (G1) y ganador del Handicap Grandes Fustas y del Clásico Pablo F. Falero.

El candidato y su atropellada tendrán varios rivales con más actualidad de los que cuidarse, tal el caso de Gran Enemigo (Qué Vida Buena, 56), que viene de dos labores muy pálidas, pero que a fines de febrero se había quedado con el Handicap Larrea, en la arena de San Isidro.

Otro ejemplar que suele moverse de menor a mayor es Iron Heart (Sidney’s Candy, 58), bastante irregular en sus rendimientos, pero que ha tenido ya varias actuaciones importantes en este nivel, incluso, quedándose con el Handicap Hunter’s Moon.

El ahora santafecino Curioso Master (Mastercraftsman, 56) bajó inesperadamente la guardia en una condicional platense, pero antes no había hecho más que sumar varios arrimes importantes en este nivel y también en los clásicos.

Desde las condicionales viene Aladdins Cave (Angiolo, 52), con una efectividad del 50 por ciento y bien livianito, como para hacer pesar este último dato y dar el golpe ante otros caballos con mucha mayor experiencia.