Ausente Elcisa, la hija de Strategic Prince alcanzó en el kilómetro del Handicap Campagnarde su mejor triunfo

Hacía unos meses ya que Urban Lady venía trabajando por lucirse en el plano jerárquico. Y para la menuda yegua del Stud Las Banderitas la ocasión ideal llegó este lunes en la recta del Hipódromo Argentino de Palermo, donde fue contundente dominadora del Handicap Campagnarde (1000 m), el tributo para la inolvidable campeona de Las Ortigas, titular del Selección (G1) en La Catedral y luego vencedora de G1 y notable reproductora en los Estados Unidos. Había sido segunda en el Clásico República de Panamá (G3) y en el Handicap Hyperion la pupila de Néstor Pastor, que después de quedar cuarta en el Clásico Ocurrencia (G3), sobre el césped de San Isidro, volvió a la cancha de Avenida del Libertador y Dorrego para hacerse perdiz. Al fin y al cabo, que una “Urban” Lady brille en la “City”, no puede más que resultar lógico…

Con Darío Ramón Gómez en sus riendas, y cargando 57 kilos, la hija de Strategic Prince fue la que mejor capitalizó la ausencia de Elcisa (Angiolo), que en los papeles aparecía como referencia máxima. No sólo porque no tuvo por delante a una rival calificada y gradual, sino también porque pudo manejar la cuerda a su antojo, disparando temprano y mostrando solvencia en las dos cuadras finales.

La norteña Shades of Roses (Sebi Halo, 57 1/2), que llegaba a este compromiso invicta, la persiguió prácticamente desde la salida, incómoda, “sacada” de ritmo, pero fue valiente y tenaz para insistir todo el tiempo, terminando como escolta desde 1 cuerpo, 3/4 por delante de Indomita Seattle (Seattle Fitz, 57 1/2), una especialista en la velocidad con codo que corrió más que bien.

Entrenada en La Plata, y de la cría de La Esperanza, Urban Lady demoró 55s21/100 en alcanzar la cuarta y más importante victoria de su campaña sobre un total de 10 presentaciones, alcanzando el 1.372.680 pesos en premios. En Upa Upa (Jump Start), la zaina encontró en el derecho porteño un lugar donde lucir al máximo sus cualidades, con bastante pista por delante para seguir buscando mejorar, incluso, pensando en ahora llegar a una conquista clásica y en ubicarse entre las mejores sprinters del momento. Con sus jóvenes 4 años, no es ninguna utopía.