Tarde con doblete por encima del nivel común la de esta tarde en el norte, en la arena y en el césped

Doblete de clásicos espera hoy en el Hipódromo de San Isidro, donde aún está fresca la imagen de Village King (Campanologist) brillando como nunca para ganar el Gran Premio Carlos Pellegrini (G1). Por un lado, sobre 1200 metros se correrá el Latency (L) y a renglón seguido, ahora en 2000, será el turno del Tresiete (L), el primero sobre arena y el restante en la grama, pero los dos para ejemplares desde los 3 años bajo régimen de handicap.

El recuerdo de Latency, crack inolvidable de Las Dos Manos, tiene en Numeraux a su primera figura. El Global Hunter de La Providencia llevará el peso máximo de 59 1/2 kilos  en la pista y distancia donde se impuso en el Clásico Telescópico, para luego quedar segundo en el Clásico Revista Palermo, otra vez sobre 12 cuadras, pero en el Argentino.

En su camino, Numeraux (foto) tendrá varios rivales exigentes, tales los casos de Vetrato (Remote, 59), Perfecta Miranda (Horse Greeley, 56) y Santos Davos (Sebi Halo, 56 1/2). El primero viene de quedar cuarto de Semáforo Plus (Alpha Plus) en el Handicap Remigio González Moreno, la yegua de imponerse en el Clásico Día de la Soberanía Nacional en Palermo y el restante de caer por 3/4 de cuerpo ante Líder Blue (Le Blues) en el Handicap Ringaro.

En el Tresiete el candidato es Dalbornell (Don Valiente, 60 1/2), que viene de una espectacular conquista en el Handicap Juan Esteban Bianchi, ganándole por 6 cuerpos a Candilero (Cisne Branco), después de dos gestiones condicionales en las que pareció ponerse a punto tras una larga inactividad.

Bien abierto arrancará el rosarino Tradizionale (Hurricane Cat, 57), que se impuso como local en el Gran Premio Ciudad de Rosario, para luego en Palermo hacerse del Clásico Irineo Leguisamo (L).

De 3 años, Super Inter (Super Saver, 53) bajó a las condicionales para reencontrarse con el disco, y ahora vuelve entonado a las jerárquicas, livianito…; mientras que Gigahertz (Cityscape, 60) salió de escena allá por julio cuando fue octaco en el Clásico Chacabuco (G2), pero como antes había prevalecido en el Clásico Granaderos a Caballo (L), convendrá no olvidarlo a la hora de las elecciones.