La cifra obligará a las autoridades o a organizar un mayor número de competencias o a eliminar caballos de a montones

La oficina de anotaciones del Hipódromo Argentino de Palermo no tiene pausa. Este lunes se registró un récord de inscriptos desde el regreso de la actividad, con 839 ejemplares postulados para las únicas dos semanas que se resolverán la próxima semana. Fueron 452 los que conformaron “la tela” del viernes 18 y otros 387 los que sueñan con poder competir el lunes 21.

Manejándose con entre 13 y 14 carreras por día, da la sensación de que habrá más eliminados que nunca, a la espera del comienzo de la acción en San Isidro y La Plata, que se espera para principios de octubre, cuando todo el tema podría empezar a normalizarse.

Los caballos preparados en el interior del país son los más damnificados por toda esta situación anómala, aunque también muchos que son preparados en el Campo 2 del Jockey Club o en La Plata han encontrado dificultades grandes para poder reprisar. Sumado al bajísimo nivel de premios, por más que las competencias se hayan reanudad, la crisis del sector continúa profundizándose.

No habrá clásicos de por medio, por lo que lo más trascendente lo aportarán los handicaps Silfo (1400 m, arena) y Campagnarde (1000 m, arena), el primero para todo caballo desde los 4 años y el restante para yeguas desde los 4 años, siempre ganadores.

Habrá que esperar hasta la tardecita del martes, entonces, para saber cómo se las arregló Palermo. Ardua tarea.