El destacado preparador, que viene de quedarse con la Pegasus World Cup, presentará a Elite Power y Casa Creed (foto) en las pruebas de velocidad de la serie de la Saudi Cup
RIYADH, Arabia Saudita (De un enviado especial).- Bill Mott es uno de esos preparadores que no necesitan presentación dentro del planeta turf. Ya son varias décadas las que lleva dando que hablar en muchas de las carreras más importantes del mundo y, en medio oriente, es toda una celebridad. No es para menos al recordar que fue el hombre que se llevó la primera edición de la Dubai World Cup (G1), cuando en 1996 con el inolvidable Cigar (Palace Music) se sacó todas las fotos habidas y por haber en el mítico Nad Al Sheba.
Cuando apenas pasaron unas pocas semanas de su notable victoria con Art Collector (Bernardini) en la Pegasus World Cup (G1), Mott intentará ser otra vez figura de un mitín de clase mundial. Sus cartas son fuertes, pues con Elite Power (Curlin), ganador del último Breeders' Cup Sprint (G1), irá por el Riyadh Dirt Sprint (G1), y con Casa Creed (Jimmy Creed) por la revancha en el 1351 Turf Sprint (G3).
El profesional no está por estas horas en esta ciudad, pero sí Neil Poznansky, galopador y entrenador asistente, y su representante para la ocasión. Los caballos llegaron el viernes y un par de días de aclimatación y en la pista sirven para una mirada general sobre sus presentes.
"Elite Power ha manejado todo de una manera estupenda, pasa por un gran momento en su entrenamiento y parece que le está gustando la pista. No estaríamos aquí si no pensáramos que puede ganar", cuenta Poznansky, con toda la fe del mundo.
Sobre Casa Creed, que fue segundo en la misma carrera que animará ahora en su versión anterior, en tanto, explica: "Es un caballo viejo y muy profesional, al que podemos llevar a cualquier lado. En estos días sólo hizo sus cosas con normalidad y creo que reconoció el lugar. Tiene 7 años, pero ha venido entrenando muy bien, sino mejor que nunca", aporta la mano derecha de Mott.
Ser una parte sustancial del equipo le ha dado la experiencia a Poznansky como para viajar con un caballo y devolverlo de nuevo a casa en un estado mejor al que llegó. "Bill lee a los caballos muy bien y sabe qué hacer. Se da cuenta cuando es tiempo de presionar o de ir más despacio. Tiene una mano estupenda para todo".
Elite Power y Casa Creed son dos velocistas de enorme clase y están listos para confirmarla aquí. Y volver a ubicar bien arriba el nombre de Bill Mott, un señor entrenador.
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