El Exito ganó el OSAF con solvencia y se establece como líder en la milla

El hijo de Il Campione ratificó todo lo bueno que venía de mostrar en el Villanueva y volvió a derrotar con claridad a Comando Secreto

Después del triunfo en el Clásico Benito Villanueva (G2) que lo proyectó a los primeros planos en la media distancia, El Exito encontró este miércoles en Palermo su consagración como número uno de la especialidad en la arena.

Otra soberbia labor le permitió quedarse ahora con el Gran Premio de las Américas - OSAF (G1-1600 m), derrotando por 2 cuerpos a Comando Secreto (War Command), el mismo que lo había escoltado hace 1 mes, aunque desde 4 largos.

Como Subsanador (Fortify) en 2023, el hijo de Il Campione fue claro dominador de una carrera que lucía competitiva en la previa, completando el doblete de G1 para el jockey Martín Valle, que un rato antes se había sacado la foto con el potrillo Holy Joy (Fortify) en el Gran Premio Montevideo (G1), y llevando a la gloria otra vez al entrenador José C. Blanco, el mejor discípulo del entrañable José Luis Palacios.

Valle fue fue fundamental en la toma de decisiones. Trajo a El Exito relajado mientras Ronda de Ases (Forge) marcaba el paso rápido y exigido, y en el derecho, cuando Forty Fain (Fortify) tomaba la posta adelante temprano, tuvo paciencia para no desesperarse y esperar que se produjeraon los huevos. Lo encontró entre el líder que se quedaba y Amigazo Sky (Falling Sky), y cuando pisó el acelerador fue imparable.

A unos 150 metros del disco El Exito ya estaba adelante y para la atropellada de Comando Secreto era tarde si de alcanzarlo se trataba, cerrándose la historia en una marca de 1m33s22/100.

Nacido en El Paraíso -con doblete de G1, ya que también se llevó el Ciudad de Buenos Aires con Labrado (Le Blues) y favorito, El Exito muestra a los 3 años un nivel que mejora en cada salida, manteniendo ahora un récord sobre la tierra de 3 triunfos en 4 presentaciones, más allá de que también en el césped mostró sus cualidades, por ejemplo, llevándose los clásicos Ojo de Agua (L) y Urbano de Iriondo (h.) (L), y escoltando a Satu (Catcher In the Rye) en el Clásico Invasor (G2), cuando fue claramente molestado por el vencedor.

La media distancia se va ordenando y encontró en El Exito un caballo de calidad, que se acomoda a todos los desarrollos y que, cuando hay que correr fuerte, encuentra su especialidad.