El hijo de Hi Happy superó por el pescuezo a su rival y tuvo el mejor desembarco posible en el Bosque
LA PLATA.- En un mano a mano apasionante, Storm Sound tuvo un desembarco ideal en la pista del Bosque para quedarse este domingo con el Clásico 25 de Mayo de 1810 (G2-1600 m, arena normal), paso trascendente en el desandar de la media distancia.
Apoyado en el gran momento que atraviesa el equipo conformado por el entrenador Omar Labanca y el jockey Lautaro Balmaceda, el zaino del Stud El Carcara sostuvo un match desde la partida con el reprisante Super Number (Super Saver) y que sólo comenzó a resolverse al promediar el derecho, cuando el ganador pudo sacarle pequeñas ventajas a su adversario y que conservaría hasta el disco.
Tras parciales firmes de 23s90/100, 46s/100 y 1m11s71/100, Storm Sound cerró su gran triunfo en 1m37s33/100 y con el pescuezo de diferencia sobre Super Number, con el veterano Sell Side (Sebi Halo) en tercero a 7 largos y Standartd (Manipulator) completando la cuatrifecta a 1 1/2 largo, tras errar la partida y quedar último.
Criado por el Haras Carampangue, Storm Sound le sumó otro punto fuerte al notable fin de semana del campeón Hi Happy (Pure Prize), su padre, que un día antes en San Isidro dio triplete con sus crías de 2 años, sobresaliendo la conquista de Just Be Happy en el Gran Premio de Potrancas (G1).
Tras la carrera, Lautaro Balmaceda contó ante el micrófono de Daniel Sinegub y el circuito cerrado del Bosque: "El caballo andaba bárbaro y le teníamos mucha fe, más allá de que no había corrido nunca aquí. Tiene mucha calidad y si temperamento, pero lo conozco bien porque lo monto a diario. Como era domingo me acompañó mi familia porque esperaba una actuación así y pudimos disfrutarlo todos juntos".
Vale darle un espacio a la notable gestión de Super Number, héroe hace un par de temporadas en la Polla de Potrillos (G3) sureña y que retornaba a la acción tras casi un año de inactividad. Después de haber visto lo que fue capaz de hacer, no cabe otra que mirar el futuro con optimismo para su gente, siempre y cuando la salud lo ayude.
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