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Estero de Ibera, 550 kilos de pura potencia para una gran victoria

Foto del escritor: Turf DiarioTurf Diario

El hijo de Il Campione se quedó con el Clásico Pedro Chapar (G3) dominando temprano y anulando cualquier atropellada

Pesa 550 kilos y corre un montón, aunque hasta el sábado último nunca había podido ganar un clásico. Con semejante físico, resulta bastante lógico que en su madurez, con 5 años, Estero de Iberá esté mostrando lo mejor de su repertorio, tanto como para quedarse con el Pedro Chapar (1400 m, césped normal), la otra gran prueba que pudo disfrutar el público en el Hipódromo de San Isidro, continuando con una gran semana en el nivel superior.

Mucho más proactivo en materia de desarrollo, el alazán preparado en Palermo por Walter Suárez y María F. Alvarez estuvo letal, firme, esperanzador, recuperándose de un inexpresivo cuarto lugar en el Clásico Reconquista (L), aunque sobre la grama pesada, y dio otro paso en ese camino de mejora casi permanente que empezó a transitar hace ya algunos meses, afirmándose primero en el terreno de los handicaps y ahora ya en las categorías más fuertes.

Si hubo algo que le sobró al triunfo del hijo de Il Campione fue solvencia, dejando que en el comienzo Paraná Miní (Winning Prize) moviera para tomar la punta, arrimándose en la curva para presentarle pelea al líder y a The Goat (Fortify), que se había prendido, y pasando al frente ni bien llegó la recta final para, con mucha rapidez, anular por completo las ilusiones ajenas.

Para los 300 metros. Estero de Iberá ya había hecho ventajas grandes, desprendiéndose, con lugar para ponerse cómodo arriba y terminar llegando a destino con 2 1/2 cuerpos de ventaja sobre un recuperado Don Latido (John F Kennedy). A otros 4, Bequepingo (Cityscape) completaba una trifecta de la que estuvo ausente el favorito Paraná Miní, sólo sexto. El tiempo de 1m21s37/100 fue de lo más destacado del día, en una cancha recuperada.

Los 1200 y los 1400 metros ya son un terreno que el nieto de Bahiaro (abuelo materno también de Amor del Bueno...) maneja a la perfección, y si sus aspiraciones son llegar al nivel máximo, tendrá que demostrar que la milla no es inhóspita para sus posibilidades, lo que tendrá la posibilidad de ensayar cuando el mes próximo se corra el Gran Premio San Isidro (G1), ante los mejores de la categoría, el día del Gran Premio Jockey Club (G1).

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