De visita en Cidade Jardim, el jockey que lidera las estadísticas en Argentina y cortó 23 años sin triunfos para yeguas en la prueba
SAN PABLO, Brasil (Especial para Turf Diario).- Única hembra del grupo, Kenlova hizo gala de todo su corazón y de su inmensa potencia para superar a 16 rivales y colocar su nombre para siempre en la historia, no sólo como brillante vencedora de la edición número 101 del Gran Premio de São Paulo (G1-2400 m, césped), sino también como la décima hembra en lograrlo, en un corolario perfecto para un espectacular fin de semana de turf, este domingo.
La tradicional competencia ofreció un espectáculo emocionante y que demuestra claramente por qué el turf es un deporte que apasiona y regala sensaciones inigualables. Ver una carrera de estrellas es algo que queda guardado para siempre, que nunca abandona la mente y que inunda el corazón de una pasión desbordante. Traduciendo lo anterior: Hay emociones que sólo el turf puede proporcionar...
Kenlova colocó su nombre junto a: Garbosa Bruleur (Tintoretto, 1948); Jocosa (Seventh Wonder, 1951); Dulce (Royal Forest, 1958); Donética (Majors Dilemma, 1978); Bretagne (St. Chad, 1985); Cisplatine (Janus, 1986); la argentina Rafaga Sureña (Justi In Case, 1996); Sweet Eternity (Effervescing, 1999); y Canzone (Westheimer, 2001).
Emerson Garcia, entrenador de Kenlova, alcanzó su segundo São Paulo en 3 años, pues antes , en 2022, Roxoterra (Gol Tricolor), que le dio a Jeane Alves el honor de ser la única jockey en ganar la carrera más importante en Cidade Jardim. Emerson está acostumbrado a hacer historia.
Múltiple campeón en el césped argentino, dominador hasta el extremo en el país vecino, Francisco Leandro volvió a casa para recoger uno de los trofeos que le faltaban, Mucho se debió a su habilidad y destreza, dando a Kenlova una monta perfecta para juntos lograr una hazaña de inmensa magnitud.
El criador y propietario de Kenlova, Stud Magia, dio un regalo al turf nacional cuando cruzó al campeón del Grande Premio Brasil Didimo (Nedawi) con Love It (Amigoni), ganadora de una sola carrera, pero dueña de una gran genética, con Danzig (Northern Dancer), Mr Prospector (Raise a Native) y mucho más en su línea de sangre.
Galo White (Goldikovic) tomó la delantera antes del primer paso por el espejo y marcó un ritmo acorde con la categoría de los inscriptos. El defensor del Haras Belmont Ltda. entró en la recta opuesta con 2 1/2 cuerpos de ventaja sobre Gesto Nobre (Courtier), Jorel (Chronnos) y Cold Heart (Alpha), mientras Kenlova iba bastante más retrasada.
En la gran curva, Gesto Nobre, Jorel y Cold Heart no tardaron en adelantar a Galo White; Obataye (Courtier) mejoraba notablemente y Kenlova llegaba justo detrás del favorito de las apuestas. El jockey de Cold Heart miró hacia atrás, pero el alazán no mostró la fuerza necesaria para desbancar a Gesto Nobre y Jorel, que seguían siendo los dos primeros.
Al pisar el acelerador, Obataye aceleró, tomó el control de la situación e incluso insinuó que podría tomar la delantera hasta el disco. Sin embargo, al pasar por el mismo lugar que su rival, entre Cold Heart y Jorel, Kenlova emergió con una acción arrolladora.
Obataye ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar y Kenlova pasó a toda velocidad a su poderoso rival, galopando rápidamente hacia el espejo, con Leandro celebrándolo. Obataye formó la exacta, en otra excelente actuación. Chernozem (Forestry), Bubbly Rain (Setembro Chove) y Maximum Drive (Hat Trick) terminaron en las siguientes posiciones.
En la novena victoria de su campaña, la tercera en G1 -las otras fueron en los grandes premios (Cidade Jardim) y Roberto y Nelson Seabra (Gávea)-, Kenlova cronometró 2m24s357/100 para batir el récord de la carrera y dejar su nombre en la eternidad.
Comments