Girona Fever regresó a la Argentina y será cubierta por el enorme Il Campione

Luis Herrera, su propietario, distribuyó un parte a los medios informando la novedad; la campeona uruguaya ya está alojada en el Haras La Leyenda

Girona Fever fue una yegua descomunal / ORANA MAGNANI

Por Diego H. Mitagstein

Su nombre ya está escrito con letras doradas en la historia reciente del turf uruguayo, y también supo dejar su marca del otro lado del Río de la Plata. Girona Fever, la formidable velocista del Stud Uruimporta, comenzó una nueva etapa en su vida: la de reproductora. La zaina que tantas alegrías brindó en las pistas volvió a cruzar a la Argentina, aunque esta vez no para competir, sino para dar sus primeros pasos como yegua madre.

Dueña de una campaña formidable, Girona Fever brilló en su país con 19 victorias, entre ellas tres inolvidables consecutivas logradas cada 6 de enero, el Día de Reyes, en el Gran Premio Maroñas (G3), un sello que quedó indeleble en la memoria de sus seguidores. Pero su figura también se agigantó en Buenos Aires, donde cumplió dos viajes y en ambos dejó su huella en el Hipódromo Argentino de Palermo, llevándose primero el Gran Premio Ciudad de Buenos Aires (G1) venciendo al tricampeón Labrado (Le Blues), y luego imponiéndose con autoridad en el Clásico Venezuela (G2). 

Retirada oficialmente de las pistas meses atrás, Girona Fever había sido alojada desde entonces en el Haras Rapetti, en Uruguay, donde recibió los mejores cuidados. En ese contexto, el stud emitió un comunicado este viernes informando su traslado a territorio argentino y agradeciendo a quienes acompañaron este delicado proceso: Guzmán Pippo, a cargo del día a día de la yegua en el haras; Inés Rapetti, por su labor veterinaria; y el Dr. Nicolás Barrenechea, por su dedicación, profesionalismo y esfuerzo constante, fundamentales para garantizar la salud y el bienestar de la campeona.

Ya instalada en el Haras La Leyenda, Girona Fever será servida en la temporada 2025 por Il Campione (Scat Daddy), uno de los padrillos más destacados del país y que viene cumpliendo con creces en sus primeras generaciones. “Creemos que es el cruce ideal para ella”, resumieron desde el equipo del stud, que encara esta nueva etapa con la ilusión de que la campeona también brille en la reproducción".

El entusiasmo es tan grande como el cariño que el equipo de Uruimporta tiene por su reina. “Girona Fever fue -y será siempre- la reina del stud”, afirma Herrera con emoción, y no es para menos: sus logros deportivos exceden lo estadístico y se ubican en el terreno de lo sentimental, de lo simbólico. No hay en Uruguay aficionado que no reconozca su nombre ni que no recuerde alguna de sus vibrantes victorias, esas que la convirtieron en una de las grandes figuras de la velocidad regional en los últimos años.

Ahora, Girona deja las pistas para iniciar su legado como madre, con la esperanza de que sus crías hereden ese mismo fuego competitivo, esa clase que la distinguió y esa valentía que tantas veces marcó la diferencia. El turf uruguayo despide a una campeona de carne y hueso, pero celebra el comienzo de una nueva historia, de esas que empiezan con una ilusión y que, con un poco de suerte, pueden terminar en nuevas páginas de gloria.

Girona Fever viajó una vez más a la Argentina. Y esta vez no solo con su físico poderoso, sino también cargando los sueños de todo un equipo que espera verla brillar, ahora, en las pistas de la genética.