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Joy Mirenla fue guapa y pareja para vencer a Doña Naif en el Clásico Jockey Club de Rosario

Foto del escritor: Turf DiarioTurf Diario

A los 6 años, la hija de Fortify llegó a la mejor victoria de su campaña superando por media cabeza a la reservada de San Benito

LA PLATA.- A los 6 años, cuando tranquilamente podría estar en un campo disfrutando de la tranquilidad del retiro, Joy Mirenla corrió la carrera de su vida para quedarse con el Clásico Jockey Club de Rosario (G3-2000 m, arena normal), la carrera más importante del atípico viernes del Bosque.

Atravesando por un momento óptimo, la hija de Fortify subíó desde la media distancia para mostrar calidad y guapeza, en un final donde debió poner todo lo que tenía para vencer a la aguerrida Doña Naif (Full Mast), que a poco estuvo de hacer fructífero su viaje desde el Campo 2 del Hipódromo de San Isidro.

Ausente Che Evasora (Greenspring), fueron apenas 4 las yeguas que salieron a la pista, con Super Dakota (Señor Candy) dispuesta a respetar a rajatabla su plan de moverse al frente, pese al asedio que le impuso en los primeros metros Paliza Salvaje (Lizard Island), defensora del título. Doña Naif apareció tercera y en el fondo, aunque cerca, quedaba Joy Mirenla.

Con parciales suaves de 26s78/100l, 51s31/100 y 1m15s50/100, todas se juntaron en la curva, con Super Dakota ya mostrando síntomas de cansancio mientras Joy Mirenla avanzaba abierta para aparearse con Doña Naif y Paliza Salvaje se estiraba muchísimo.

Llegó el derecho y comenzó la pelea sin cuartel entre la ganadora y Doña Naif, que llegarían al disco separadas por apenas media cabeza, mientras Paliza Salvaje volvió en el final para completar la trifecta al anca, con Super Dakota cerrando la marcha a varios cuerpos y en 2m6s10/100.

Preparada por Oscar Frávega para el Stud Asunción, Joy Mirenla contó con una conducción ideal por parte de Francisco Arreguy (h.) y así elevó su récord a 5 primeros puestos en 25 presentaciones, con casi 6,5 millones de pesos en premios.

Criada en el desaparecido Haras La Biznaga, la zaina tiene por madre a Stormy Mía (Bernstein), que antes había producido al muy corredor Milanés Joy (Fortify), titular aquí del Clásico Jockey Club de Venezuela (L). La abuela de la heroína de la fecha es la G2 Forty Miau (Roar), que también ocupa el mismo lugar en el pedigree de la campeona Joy Canela (Fortify) y de la clásica Gatita Rye (Catcher In the Rye).

 
 
 

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