Juan C. Etchechoury (h.): "Siempre supe que en Roshita tenía una potranca para soñar"

El entrenador sumó un nuevo G1 para su gigantesca trayectoria, ahora con la defensora de Rubio B. en el Jorge de Atucha

Carly Etchechoury volvió a los triunfos de G1 / HAPSA

Si hay algo a lo que está acostumbrado Juan Carlos Etchechoury (h.) es a ganar carreras importantes. Su extensa y exitosísima trayectoria está llena de grandes momentos, pero eso no evita que, ante cada nuevo festejo fuerte, el entrenador se emocione como si fuera la primera vez.

Dedicado desde hace unos años ya a entrenar exclusivamente los ejemplares del Stud Rubio B., Carly disfrutó muchísimo de la victoria que alcanzó Roshita en el Gran Premio Jorge de Atucha (G1) del jueves de la última semana en el Hipódromo Argentino de Palermo.

No sólo por el hecho de tratarse de una competencia tan importante, sino también por ayuda en el desarrollo de un padrillo como Gouverneur Morris (Constitution), por el que el Haras La Pasión apostó al máximo, jugando en equipo.

"Antes de que debutara, le había comentado a mis amigos que tenía una potranca que me gustaba y mucho. Ya desde muy temprano empezó a hacer las cosas muy bien, siendo muy demostrativa en la cancha, pero con clase, no de esas apuradas que insinúan mucho y después resulta que eran solo pura espum. Claro que lo tenía que demostrar con la chaquetilla", cuenta el preparador, con su tranquilidad habitual.

Luego, agrega: "Me confirmó en el Unzue que no estaba equivocado, ganando en muy buena forma, y ahora superó aquella actuación haciendo las cosas muy fácil y con mucha autoridad. De mañana es muy tranquila, tiene una clase tremenda, te ayuda en el trabajo diario. Da gusto entrenarla porque si le pedís, ella responde. Además, ya está más hecha, estoy muy ilusionado con ella".

Antes del Gran Premio Jorge de Atucha se decía que la corrida de Roshita no había sido buena, y el entrenador aclara ese malentendido: " Ella andaba bárbaro, lo que pasa que la pasada salió mal y eso me desordenó todo. Que se entienda, no anduvo mal, salió mal el trabajo programado. Después la partida fue buenísima, los estudios que le hicimos, de absolutamente todo, dieron bien, y por eso corrimos. Nunca me dio ningún síntoma de que le pasara algo o de que su estado no fuera el que yo quería".

Consultado sobre el futuro, el hermano mayor de los Etchechoury anticipa: "La lógica es seguir el proceso selectivo. Antes de la Polla de Potrancas (G1), está el Juvenile Fillies de las Estrellas (G1), que este año se corren en Palermo. Y el objetivo de máxima siempre es el Selección pero falta mucho".

El entrenador guarda su reflexión final para Gouverneur Morris y lo que significó para él poder aportar su granito de arena en el doblete de G1 del padrillo el 1 de Mayo: "Hace rato que estábamos esperando que saliera una potranca como esta y llegó de la mano de Gouvernour Morris, que empuja mucho y que al haras le estaba faltando.  Tengo de él un potrillo que está haciendo las cosas muy bien y un par de potrancas a las que todavía le falta un poco, pero me parece que van a ser muy macanudas, incluso para correr en más distancia".

Si bien, por lógica, no tiene el protagonismo de hace unos años, cuando tenía a su cargo decenas de caballos reservados o elegidos de diferentes propietarios, Juan C. Etchechoury (h.) siempre está. Trabajando, forjando campeones, una especialidad de la casa.