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Juan Cruz Rivarola y Elenika: un reencuentro que valió oro

  • Foto del escritor: Turf Diario
    Turf Diario
  • 16 jul.
  • 2 Min. de lectura

El jockey volvió a estar en la silla de la potranca líder tras la baja de William Pereyra y juntos dominaron la milla del Bosque. “Siempre confié en ella”, contó el piloto, emocionado


Juan C. Rivarola y un gesto que lo dice todo / HLP
Juan C. Rivarola y un gesto que lo dice todo / HLP

LA PLATA.- Juan Cruz Rivarola no iba a correr a Elenika en el Clásico Miguel Luis Morales (G2) de este martes en el Bosque. La hija de Winning Prize venía de ganar el Clásico Raúl Aristegui (G2) con William Pereyra en sus riendas, y sus dueños habían decidido respetarle la monta.

Sin embargo, el destino quiso que Pereyra no pudiera viajar hasta la ciudad de las diagonales y el jinete local volviera a estar en la silla de la zaina, quedándose, juntos, con el Morales, ya camino hacia la Triple Corona

Pero no fue una casualidad, ni cosas del destino, porque Rivarola, a pesar de que no la iba a correr, siguió montando en las mañanas a la líder del proceso selectivo local, apoyando el trabajo de Esteban y Cristian Brown, en un esfuerzo que obtuvo la mejor de las recompensas.

"Elenika es una potranca que viene de menor a mayor, que siempre hizo las cosas muy bien en la cancha. La última vez la tuve que dejar por un compromiso, y a veces te toca perder para ganar... Siempre la subo y los patrones habían decidido respetarlo a William Pereyra porque venía de ganar con él. Nunca me bajé en las mañanas, haciendo  equipo con Esteban y Cristian  Brown. William no pudo venir, me la dieron y nos fue bien", contó Juan Cruz, satisfecho, ante el micrófono de Daniel Sinegub para el circuito cerrado sureño.

Luego, agregó:"Tengo la suerte de conocerla y pegábamos el salto a la milla, que siempre es un desafío. Me dijeron que la corriera con confianza, que se iba a poner sola. Temprano me pasaron y la tuve un poquito, para no apurarme, aunque sin dejarla lejos. Pero por los 800 metros ya venía sobrando, decidí ir a buscar a las de adelante y dominó muy fácil".

Sobre el final, el profesional dejó su reconocimiento para los entrenadores de Elenika: "Esta victoria se la dedico a Esteban y a Cristian, que desde el día que salí a correr de la escuela me apoyaron".

Por su parte, Esteban Brown opinó: "La veo bien para seguir creciendo y también para ir a mayores distancias. Tiene mucho motor, es muy potranca todavía. Es mansa, buena comilona, y va madurando en cada carrera. Esta vez estaba un poquito nerviosa y me asustó un poco, pero las cosas salieron bien. Juan la conoce y eso no es menor. Por ahora vamos a seguir el proceso selectivo en La Plata".

Elenika sigue sumando triunfos y alegrías para su gente, que le tiene una fe ciega y sueña con llegar mucho más lejos...

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