Tras superar un gravísimo problema de salud, el hijo de Galileo recuperó su título en la tradicional prueba de Royal Ascot
BERKSHIRE, Inglaterra (Especial para Turf Diario).- Kyprios se convirtió en el primer caballo desde Kayf Tara (Sadler's Wells)en 2000 en recuperar el título en la Ascot Gold Cup (G1-4000 m, césped de bueno a firme) con una decidida exhibición a las órdenes de Ryan Moore.
Ganador en 2022, pero obligado a perderse la carrera del año último tras sufrir una infección en una articulación del nudo, el favorito Kyprios recuperó su mejor versión, convirtiéndose en el noveno ganador de la famosa carrera de larga distancia en Royal Ascot para el entrenador Aidan O'Brien.
El alazán de 6 años demostró toda su clase y su capacidad de lucha al imponerse en un emocionante duelo con Trawlerman (Golden Horn), de John y Thady Gosden, que había sido su vencedor en la QIPCO British Champions Long Distance Cup (G2) de Ascot en octubre.
Hubo 1 cuerpo de diferencia entre ambos en la línea de meta, mientras que Sweet William (Sea the Stars), compañero de caballeriza de Trawlerman terminó tercero, cinco cuerpos más atrás.
Sobre lo inusual que es que un caballo vuelva después del problema que tuvo Kyprios, O'Brien dijo: "Diría que es de millones a uno. Era realmente imposible que volviera de lo que tuvo. Hubo un momento en el que no estábamos seguros de que sobreviviera. Este caballo regresó al más alto nivel, lo que es increíble. No debería haber ocurrido, no sé cómo, pero creo que pasó gracias a toda la gente que estuvo a su alrededor y que hizo tanto día tras día. Han estado tan comprometidos, se han comunicado tan bien, todos le dieron prioridad.
"Se le infectó la articulación y llegó a la cápsula articular. Lo normal es que se pierda el movimiento de la zona, y él lo perdió durante un tiempo, ¡pero volvió a recuperarlo! Es por el cuidado que todos pusieron.
"Hubo un momento en que parecía que no iba a vivir. Luego fue ponerse de pie, caminar, trotar y volver a enseñarle a galopar, porque tenía que volver a mover todo el cuerpo de diferentes maneras. Fue increíble, realmente increíble. Siempre tuvo la mente más fuerte, probablemente ese fue siempre su poder, su mente", contó O'Brien, fascinado tras su G1 número 401.
Comments