La atropellada de Candlelit la llevó al triunfo en el Clásico General Las Heras
- Turf Diario
- hace 3 días
- 2 Min. de lectura
Después de dos gestiones que no conformaron esta temporada, la hija de Equal Stripes se rehabilitó en pista pesada
Adaptándose a un terreno bravísimo y aprovechando al máximo el tren sostenido que sostuvo al frente la veloz Candy and Giant (Giant's Pleasure), Candlelit mostró su mejor versión y se rehabilitó quedándose este sábado con el Clásico General Las Heras (G3-1400 m, césped pesado), la prueba más fuerte de la muy entretenida reunión que se desarrolló en el Hipódromo de San Isidro.
Protagonista secundaria del proceso selectivo en la cancha principal del Jockey Club durante la última temporada, no había conformado en sus dos salidas previas de 2025, pero ahora, en un turno más difícil y ante rivales de buenos pergaminos, volvió a dar la nota para alcanzar el triunfo más trascendente de su campaña y el segundo en el plano black-type, pues ya tenía en su cuenta el Bayakoa (L), bajo las mismas condiciones en que se impuso ahora.
Desde su montura, Kevin Banegas la dejó de las últimas ni bien se abrieron los partidores, al tiempo que, como se podía adivinar, la mencionada Candy and Giant salía a marcar el paso perseguid por Early Life (Suggestive Boy). La puntera salió en un parcial de 24s83/100, pero empezó a acelerar y los 800 metros los descontó en 47s69/100, con la pista bastante abierta.
Llegó la recta y las energías le duraron poquito a la líder, con Fiesta Porteña (Fortify) pasando al frente por dentro. A esa altura, Candlelit había arrancado desde atrás, gambeteando adversarias, para dominar en los 50 finales, estableciendo en el disco 3/4 de cuerpo a su favor y con Nicolás Martín Ferro superando a Enrique, su padre, en el duelo de entrenadores. El tiempo de 1m26s96/100 habla con claridad sobre las condiciones en que se corrió.
Reservada del Haras Abolengo, e hija del formidable Equal Stripes, Candlelit es la primera cría de Fall On the Beach (Treasure Beach), con la misma familia materna del campeón Forty Fabuloso (Roar) y del G1 Storm Dynamico (Dynamix).
Hasta ahora más cómoda entre los 1200 y los 1400 metros, para Candlelit la cuestión pasará ahora por llegar con la misma fuerza a la milla, donde encontrará muchos clásicos en el calendario. Si atropella como lo hizo esta vez, no le costará conseguirlo.
