Con mucha contundencia, la potranca del Stud Tres Jotas se quedó con el Clásico Miss Terrible, sobre el kilómetro de césped pesado
La Meninha (58 1/2 kg.) ganó el Clásico Miss Terrible (1000 m, césped) con mucha autoridad y le mandó un mensaje a toda su gente. "El pasto es mi casa", pareció decir la hija de Le Blues con su notable actuación, de regreso a la misma superficie donde en diciembre había corrido espectacular, al llegar cuarta de Arellano (Angiolo) en el Gran Premio Félix de Alzaga Unzué (G1), y cargando uno de los pesos más elevados...
Luego de un par de gestiones que dejaron sabor a poco en la arena de Palermo, y también ya más hecha a los desarrollos que se dan en el kilómetro de recta, la potranca de Tres Jotas evoluciona desde lo físico y también desde su poderío, cumpliendo los pronósticos que podían trazarse luego de sus primeras carreras en La Plata y al retorno de la larga pausa que interrumpió su campaña por más de 6 meses a mediados de la temporada anterior.
Pesando 472 kilos, su máximo hasta el momento, casi 30 por encima de los que marcaba la balanza cuando empezó a competir, La Meninha no es la tradicional sprinter que sale corriendo de las gateras a toda velocidad, sino que se va haciendo fuerte con el correr de los metros, guardando lo mejor para desatar esa atropellada que tiene y que siempre llamó la atención.
Francisco Leandro se preocupó por mantenerla serena y sin desgastarse en la bravísima grama norteña del sábado, pero de los 400 metros en adelante le aflojó las riendas y La Meninha tuvo la mejor respuesta, arrimándose en dos saltos y dominando para luego afianzarse.
De nada valieron los esfuerzos de sus rivales por resistir, arriba la ganadora estuvo implacable, llegando al disco con 2 cuerpos de ventaja sobre Durmia (Cityscape, 57 1/2), con la topweight Forty Vise (Fortify, 59) en tercero a la cabeza y la outsider Fantastic Bomb (Hit It a Bomb, 51 1/2) aprovechando al máximo el peso oblea para quedar en cuarto, medio largo más atrás, todo tras 1m91/100.
Presentada por Ramón Acuña Candia, La Meninha volvió al césped y gustó, como para pensar que luchará por las mejores carreras de la división sobre esa superficie.
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