Holy Joy, los invictos Colifato Novo (foto) y Giustino; el platense Seek Wave y los prometedores Oleguer y Kopke, en un espectacular inicio de la Triple Corona, este sábado
No son pocos los que sostienen que la versión 2024 del Gran Premio Polla de Potrillos (G1-1600 m, arena), que se correrá este sábado en el Hipódromo Argentino de Palermo, es una de las mejores de los tiempos recientes.
El tiempo terminará por responder el peso de esa aseveración, lo que sí es concreto es que no faltará ninguno de los grandes nombres que fue dejando el largo y pesado camino del proceso selectivo. Por ejemplo, estarán los líderes en cada una de las pistas más importantes del país, con el invicto Colifato Novo (Lenovo), Holy Joy (Fortify) y Seek Wave (Seek Again) como exponentes del tope generacional en San Isidro, aquí y en La Plata, respectivamente; un tal Giustino (Full Mast) que tampoco sabe de derrotas y ganó el Old Man (G3) y varios otros 3 años que hicieron los méritos suficientes como para tener su lugar en los partidores.
Ya más difícil es proyectar al ganador, como así también si, finalmente, después de 28 años de sequía, la Triple Corona encontrará un dueño. Refinado Tom (Shy Tom) fue el último en ganar la Polla, el Jockey Club (G1) y el Nacional (G1) en fila, y desde entonces la misión se volvió imposible.
Con la ventaja de la localía, Holy Joy (Fortify) enfrenta el reto más exigente de su campaña con ganas de dar otra vez la nota. Saltó a la fama quedándose con el Gran Premio Montevideo (G1) y, tras unos meses esperando, ratificó sus condiciones venciendo en el Clásico Miguel Cané (G2), carrera que sacó adelante pese a sufrir en los días previos un problema en un vaso que lo tuvo a maltraer y no le permitió llegar a ese compromiso con los 10 puntos.
El zaino de Juan Carlos Bagó y Firmamento quiere dejar la primera mancha en el palmarés del no menos notable Colifato Novo, el crack de todos, el que tendrá una hinchada más grande que ninguno. Después de un inicio extra en Río Cuarto, Córdoba, el potrillo que prepara y corre Joaquín Cano empezó a crecer venciendo en el Clásico Manuel Anasagasti (L), dio el salto a las grandes ligas en el Estrellas Juvenile (G1) y confirmó su poderío llevándose las 2000 Guineas (G1), siempre corriendo adelante y suerte, una táctica que podría no darse aquí, ante la presencia de otros punteros peligrosos.
Escolta de Holy Joy en el Cané con poca experiencia, Oleguer (Equal Stripes) buscará ser la revelación de la Polla, aunque deberá de mejorar un paso más, y en La Plata todo es ilusión con Seek Wave, el héroe de la Polla sureña, que viene de ganar 4 carreras consecutivas -3 clásicos de grado- y aspira al título de ídolo.
Cuando se corrió el Old Man, Giustino encantó con su forma y su capacidad, y todo hace pensar que el paso de los 1400 a los 1600 metros debería de colaborar para que su nivel sea todavía mejor. El alazán es tan candidato como cualquiera.
Roberto Coco Bullrich, el hacedor de Refinado Tom, tiene su sueño en Nooresh (Suggestive Boy), buen tercero en el Old Man tras un debut exitoso, y en Las Monjitas se entonan con un Kopke (Hi Happy) que salió de perdedor de forma espectacular y va por la gloria total.
Adelante puede salir Yak Sport (Glory Seattle), para el que se eligió la suelta 1, y tanto Bernicio (Fortify), Mr. Versace (Fortify) y Descamisado (Cosmic Trigger) lejos están de ser simples figuras decorativas; ¡todo lo contrario!
La Polla de Potrillos, un carrerón.
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