El jockey fue fundamental en el triunfo del hijo de Goldencents, que por hocico y hocico batió a Sierra Leone y al japonés Forever Young, que dieron ventajas en el desarrollo y se la pasaron chocándose durnate toda la recta final
El entrenador Kenny McPeek y el jockey Brian Hernández Jr. hicieron historia este fin de semana en Churchill Downs, convirtiéndose en los primeros profesionales desde 1952 en ganar el Kentucky Oaks (G1) y el Kentucky Derby (G1) en la misma temporada.
Ben Jones lo haía logrado con Real Delight (Bull Lea) y Hill Gail (Bull Lea), hace más de 7 décadas, ahora la potranca Thorpedo Anna (Fast Anna) y el potrillo Mystik Dan (Goldencents) le dieron a McPeek y Hernández festejos inolvidables.
Con más de 156.000 espectadores en las tribunas, en un Churchill Downs renovado y siempre mágico, el potrillo del 4 G Racing LLC y Daniel Lance Gasaway se llevó la versión 150 de la carrera que todos quieren ganar en los Estados Unidos.
Sobró la emoción y también la polémica en ese final donde Mystik Dan contuvo por hocico y hocico a Sierra Leone (Gun Runner) y al japonés Forever Young (Real Steel), y del que estuvo muy lejos el favorito Fierceness (City of Lights), una sombra y que sólo logró terminar décimo quinto.
Ganó el mejor corrido, porque lo de Brian Hernández Jr. en las riendas del nieto de Colonel John fue formidable, sin perder un metro durante toda la carrera y realizando el movimiento fundamental en la curva, cuando aprovechó un pequeño espacio que Joel Rosario y Track Phantom (Quality Road) dejaron junto a los palos, tomando el riesgo y filtrándose a los empellones, dominando y sacando ventajas en los albores de la recta que le permitieron arriba mantenerse.
Por el contrario, Forever Young la pasó mal en la largada y Sierra Leone debió abrirse micho en la curva para encontrar un espacio por el que atropellar, y cuando ambos consiguieron empezar a descontar, se dieron golpes de lo lindo que les impidieron, quizás, llevarse la gloria.
Incluso, pudieron observarse maniobras antideportivas por parte de Tyler Gaffalione sobre Sierra Leone, sujetando con su mano izquierd al potrillo japonés. No se entendió porqué no hubo reclamo, ni tampoco porque los comisarios no intercedieron, al menos para despejar la duda. Evidentemente, en todos lados se cuecen habas.
Si bien estaba atrás en las apuestas, Mystyk Dan era parte del grupo de potrillos que podían aspirar al primer lugar, pues antes había vencido en el Southwest Stakes (G3) y finalizado tercero en el Arkansas Derby (G1) que ganó el ahora ausente Muth (Good Magic), preso de la condena eterna sobre Bob Baffert.
"Durante tres semanas, sentí que íbamos a ganar las dos carreras, y no puedo decir por qué. Ambos caballos fueron muy fáciles de manejar. El equipo hizo un gran trabajo todos los días. No hubo ningún drama, Lance y Sharilyn Gasaway fueron personas maravillosas que llegaron y decidieron disfrutarlo todo. Creo en la energía positiva y tuvimos mucho de eso. Y dos buenos caballos. Brian hizo un trabajo increíble. Estoy honrado y orgulloso de estar aquí", contó un Kenny McPeek pura sonrisa.
Hernández, por su parte, expresó: "Aún no lo asimilo. Es increíble. Llegamos al fin de semana pensando que teníamos buenas ocasiones, grandes ocasiones, tanto el viernes cuanto el sábado. Tenemos que agradecérselo a todos los chicos del stud que ousieron tanto trabajo en esto para tener estos caballos listos en días como hoy y ayer. Es como dije, no sé cuánto tiempo va a tomar para entender lo que me pasa, , pero es definitivamente un momento surrealista", contó Hernández.
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