El caballo que se había quedado afuera en Del Mar le dio otro gran éxito a Kenny McPeek y a Brian Hernandez Jr. en Churchill Downs
LOUISVILLE, Kentucky (Especial para Turf Diario).- El entrenador Kenny McPeek y el jockey Brian Hernández Jr. pasan por un estado de gracia que quieren no se termine nunca, y, si es en Churchill Downs, todo fluye mucho mejor aún.
Bajo las torres gemelas, donde en mayo hicieron historia ganando el Kentucky Derby (G1) y el Kentucky Oaks (G1) en el mismo fin de semana, ahora volvieron a unirse para una foto importante con Rattle N Roll, el veterano hijo de Connect que se agrandó como nunca para quitarle el invicto al potrillo Most Wanted (Candy Ride) y quedarse con la versión 2024 del tradicional Clark Stakes (G2), disputado sobre 1800 metros en la cancha de arena normal y dotado con 600.000 dólares en premios, parte central de la jornada de Thanksgiving.
Tras quedarse afuera del Breeders' Cup Classic (G1) en Del Mar, hasta donde viajó a la espera de un lugar como suplente que nunca se hizo, el zaino propiedad del Lucky Seven Stable mostró su mejor faceta en el derecho, cuando cargó abierto para trenzarse en un apasionante mano a mano con Most Wanted, que vino siguiendo el andar del puntero Grand Aspen (Dialed In), dominando en el tramo final de la curva.
Abriéndose, el potrillo intentó defenderse, pero la carga del ganador fue lo suficientemente efectiva como para marcar una diferencia de 3/4 de cuerpo al cruzar el disco. A 3 1/4 largos más, el tordillo Hit Show (Candy Ride) cruzó la meta en tercera posición, pero luego sería distanciado hasta la cuarta posición por molestar a Uno Más Bourbon (Macho Uno), que completó la trifecta. El tiempo de la carrera fue de 1m49s60/100.
En Jazz Tune, por Johannesburg, Rattle N Roll llegó a la novena victoria de campaña que ya lo había visto festejar en el Claiborne Breeders' Futurity (G1) a los 2 años, en el Oklahoma Derby (G3) a los 3, en el Ben Ali Stakes (G3), en el Pimlico Special (G3) y en el Blame Stakes (G3) a los 4.
Pese a que entrará en 6 años, de permanecer en competencia, Rattle N Roll es una gran opción pensando en los grandes clásicos de arena que se vienen en oriente.
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